miércoles, 25 de marzo de 2015

"El Ego Nos Hace Sufrir"




Nuestro ego, es la parte peor de nuestro carácter. Es algo alimentado por la fantasía y la mayoría de las veces inflado, que nos hace creer que somos mejores de lo que en realidad  somos, y nos hace pensar que la gente nos tiene envidia.

-El ego, según Mario Alonso Puig se origina desde muy niños: “al sentirnos aislados o indefensos, guardamos el recuerdo de ese sentimiento en nuestro cerebro”. 

Concretamente en los núcleos amigdalinos. Cualquier experiencia que vivamos de adultos que incremente esas sensaciones avivará el recuerdo y disparará un mecanismo de defensa que no podemos controlar.

-Cuando todo se altera, nos ponemos en alerta, es como si se nos disparara la alarma del fuego que empieza a echar agua en cuanto detecta el humo, y aparecerá la parte más violenta  y peor que poseemos, además y para colmo, en cuanto estos mecanismos se activan, se nos desconectan los de la inteligencia, y nos volvemos” un poco más tontos”.

-El ego necesita estar siempre perfecto, tiene que dar una buena imagen a costa de lo que sea, y no tiene ningún inconveniente en pisar cabezas para situarse por encima de todos, porque cree que siempre es el mejor.


-Las personas que tienen una cierta posición social, económica, política…etc, suelen tener a su alrededor a una serie de personas que se dedican a “hacerles la pelota”, y alimentan su ego de tal manera que les aíslan de su realidad, y ese es uno de los motivos por lo que no se enteran de cómo va la vida, ya que viven en la burbuja de maravillas que les han construido.

-Las personas que viven dominadas por su ego, aparentan tener mucha autoestima, se creen superiores al resto, y eso mismo es lo que les hace alejarse cada vez más.

-Esta falsa autoestima, está llena de miedo a que los demás descubran su realidad y por eso se suelen comportan con agresividad e insolencia.

-Todos tenemos dentro un maravilloso mundo nuevo y desconocido que tenemos que sacar fuera, pero ese ego tramposo, lo intentará evitar a toda costa, porque le asusta.

-Tenemos un cerebro maravilloso, que puede mandar mensajes a nuestro cerebro para que nos ayude a conseguir nuestras ilusiones.

-El diálogo interno se percibe a través de la intuición,  debemos dedicar un tiempo al silencio, a escucharnos a nosotros mismos, no hay que despreciarlo porque suele acertar.

-La inteligencia es la capacidad de penetración, la introspección; es tan importante, que deberíamos darle un tiempo fijo mucho más a menudo, porque  tenemos un ruido que nos dice cosas que vienen de fuera, que son producto de razonamientos ajenos y de prejuicios.

-Necesitamos aprender a relajarnos, porque si no estamos relajados, no podremos conectar con nuestro hemisferio derecho. Si no tenemos ilusión y pasión para buscar lo que realmente queremos no conseguiremos nada.

-La imaginación es muy importante para desear algo. 

Un magnífico ejercicio sería relajarnos con los ojos cerrados,  e imaginarnos que conseguimos aquello que tanto deseamos, y cuanto más lo imaginemos, más cerca estaremos de conseguirlo.

-El ego en cambio, lo que alimenta es la fantasía, y a veces nos llena la cabeza de humo, de cosas que nuestra soberbia nos hace creer que son posibles, aunque sean totalmente absurdas.

-Hay que acallar al ego con pasión y fe, la pasión ha de ser mayor que el miedo que nos produce cambiar, porque todo cambio hace que despierte en nosotros algo que estaba dormido, y  aunque  tengamos capacidades y energías para conseguirlo, a veces asusta un poco.

-Cuando nos acostemos cada noche, deberemos preguntarnos con los ojos cerrados que queremos en nuestra vida, porque sabemos que al penetrar en el interior, estamos produciendo como dijo Santiago Ramón y Cajal cambios profundos en el tejido cerebral:


-“Las espinas dendríticas de Ramón y Cajal aumentan cuando una persona se apasiona en hacer algo y aumentan la conexión entre sus neuronas” es decir abren nuevos caminos neuronales que les hacen más listos.

-Esta neuroplasticidad que es como se llama este proceso, también provocará el movimiento de las células madre a los hipocampos, produciendo nuevas neuronas o “nuerogénesis”.

-Tenemos que aprender a aceptarnos a nosotros mismos tal y como somos, porque toda esa necesidad de que nos acepten los otros, son fantasías que el ego nos ha creado.

No necesitamos esas tonterías para ser felices, somos personas maravillosas, y no nos culparemos ni nos exigiremos cosas para agradar a los demás.

-Llevaremos una vida alegre, nos cuidaremos , nos querremos, aprovecharemos los momentos de felicidad, y practicaremos nuestros hobbies con las personas que nos gustan y que queremos .


-Buenas noches