lunes, 18 de mayo de 2015

"Nuestra Vida Ha Cambiado"





Todos los que hemos cumplido 60 años, notamos a veces que estamos en otra onda, que nuestra vida ha cambiado tanto, que a veces nos parece estar en otro país.

-Esta mañana, una amiga catedrática, con todas las neuronas alerta, que enseña en la Universidad sin que nunca haya estado bajo sospecha de que chochee, me contaba  que a veces  tiene la sensación de que muchas de las personas que la rodean, actúan de una manera tan extraña, como si vinieran de otro planeta.


-Se ha reído muchísimo cuando la he dicho, que lo son; que estoy convencida de que entre nuestra generación y esta, ha habido un cambio planetario, porque han dado la vuelta a nuestras vidas, como si se tratase de un calcetín.

-Leí hace tiempo, un interesantísimo artículo del periodista y escritor uruguayo Eduardo Galeano, en el que hablaba sobre esto mismo,  con mucho sentido del humor, que es la mejor manera de hacerlo.

-Nos casamos jovencísimos, seguros de que nuestro amor duraría por siempre jamás, y envejeceríamos juntos rodeados de una gran familia; porque entonces, la sola idea de vivir junto a la persona amada, se parecía mucho a eso de poder agarrar el cielo con la mano.

-Todavía, los que seguimos viviendo con nuestra pareja, nos levantamos cada mañana con el mismo propósito.

-Ahora, las parejas que planean casarse, te dicen entre risas que todas las parejas tienen fecha de caducidad, y se quedan tan frescos.

-Nuestro primer coche, un Seat 124D,(lo compramos a plazos), lo cuidábamos como un tesoro, y lo vendimos a los diez años( con gran pena), porque se paraba sin avisar, con el peligro que ello conlleva.

-Ahora, los jóvenes te razonan y argumentan enseguida, que tienen que cambiar de coche, o de teléfono, o de ordenador, porque ya está obsoleto, y  yo creo que la verdad es que ha salido un modelo nuevo, y  quieren comprárselo.

-Nosotros  criamos a nuestros hijos con gasas que lavábamos y reutilizábamos una y otra vez, mientras que ellos crían a los suyos con pañales de tirar.


-En nuestras casas se guardaban los papeles de los regalos, y los de las pastelerías para envolver nuestros bocadillos, que luego se metían en una bolsita que nos hacían las abuelas con nuestro nombre bordado,que  lavaban los sábados en casa y volvíamos a utilizar el lunes durante todo el curso.


-Guardábamos las botellas y los botes de mermelada para envasar tomate y compotas para el invierno, y las de coca cola , gaseosa, cerveza, se llamaban cascos, y  te pagaban por ellas.

-Íbamos a comprar la leche a la lechería, con una lechera de aluminio, o con nuestras botellas  lavaditas, y ahora nuestras basuras aparecen inundadas de tetrabrikes de leche, caldo, tomate, salsas, aceite, vino, y  de cualquier cosa.


-Es perfectamente normal, que nosotros que crecimos guardándolo todo, choquemos con  los que tiran todo, aunque esté nuevo, para sustituirlo por otro mejor, así que  no vamos a estresarnos, y fingiremos que entendemos lo inentendible, porque hay que actuar como el junco que se cimbrea al son del viento y no se rompe.

-La pena es que con  estas generaciones tan tironas, tenemos muchos cubos de basura ,y acumulamos tantísimas toneladas que nos asfixian.

-Buenas noches