La herencia genética, es la responsable en un 50% de nuestra felicidad, y también determina nuestra personalidad. Es lo que llaman la “arquitectura genética de la personalidad”. ( Según un interesantísimo estudio de un grupo de psicólogos de la Universidad de Edimburgo, junto a un grupo de investigadores australianos del Queensland Institute for Medical Research),
-Han llegado a la conclusión de que el otro 50% dependerá, de factores externos, relaciones sociales, salud, e incluso de nuestro éxito laboral.
-Lo que no cabe duda es que la manera en que las personas perciben la vida, tiene un componente genético, además de factores externos.
-Muchas veces nos ha pasado a todos, que a partir del momento en que hemos conocido a la madre o al padre de algún amigo, no nos ha extrañado su forma de ser, porque se veía claramente la gran influencia genética y familiar. Por eso en los pueblos que tienen esa sabiduría tan antigua dicen:” Si quieres saber como va a ser tu novia de mayor, mira a su madre, je, je,….
-En mi caso, es una gran verdad, pues cada vez me parezco más a la mía, aunque no la descalce….
-Los genes nos determinan rasgos de la personalidad, que nos ayudan a ser un poco más felices, como ser sociables, y no preocuparnos demasiado.
-Unos genes adecuados, actuarán de barrera, en los momentos malos de nuestra vida, y nos ayudaran a recuperarnos mejor.
-Para poder comprobar estos experimentos, estos científicos se han servido de parejas de gemelos y mellizos, que al estar adoptados, no tienen un estilo de vida parecido.
-Los gemelos idénticos, declararon sentirse igual de felices y satisfechos con su vida, tenían personalidades y formas de bienestar muy similares, mientras que en los mellizos presentaban solo el 50% de esas similitudes. “Eso”, según Tim Bates. “implica fuertemente a los genes”
-Los autores de este estudio, han llegado a la conclusión de que no es que exista un solo gen de la felicidad, sino que existe una mezcla de genes que determinan que tengamos una personalidad con mayor o menor tendencia a ser feliz.
-La profesión también influye en la felicidad, porque una persona que disfruta con su trabajo es feliz, mientras que los que se sienten infelices en su trabajo, no pueden serlo.
-Los investigadores preguntaron a los voluntarios de edades comprendidas entre 25 y 75 años, sobre su personalidad: cuánto solían preocuparse y cuán satisfechos estaban con sus vidas.
-La consecuencia final de este estudio, es que las personalidades extrovertidas, calmadas, con confianza en si mismas, brindan una fuente a la que llamamos “Reserva Afectiva”, que nos conducirá a la felicidad futura.
-Al final siempre acabo con los niños.
-Los niños son el futuro nuestro, de la vida del Mundo.
-¡ Todos tenemos la obligación y el deber moral de contribuir, aunque solo sea sonriéndoles, a que estos niños, sean adultos felices, equilibrados, cariñosos, generosos, empáticos, altruistas y un largo etcétera para que mañana el mundo sea mejor!.¡Ánimo!