Esta mañana, he recibido un correo precioso de una amiga, y después de leerlo, y reírme un rato, necesitaba decírselo a alguien, quería compartirlo. Estaba sola en casa, y esto no era posible, así que se lo reenvié a París a mi hija Gema, y cuando lo leyó y lo comentamos, parece que todo estaba en orden.
-Las cosas se disfrutan mucho más cuando se pueden compartir. ¿De qué te vale, haber tenido un día estupendo, si no se lo puedes contar a nadie?
-Es mágico, cuando tenemos una buena noticia, y se la contamos a alguien que nos quiere, alguien que nos entiende y que se alegra con nosotros y por nosotros, porque al contarlo, nos volvemos a alegrar, incluso nos fijamos en detalles que antes nos habían pasado desapercibidos.
-Es importantísimo que revisemos nuestros vínculos con los demás. Necesitamos a la gente para vivir, no se puede estar solo siempre, no es sano.
-Puedes vivir solo, pero necesitas personas con las que compartir tus alegrías y que sepas que se alegran por ti, que te desean lo mejor. A veces son tu familia, a veces tus amigos, hasta hay veces que se lo puedes comentar a simples conocidos.
-Todos tenemos que tener a alguien que en un momento podamos mandar un mensaje, o hacer una llamada de teléfono y contarle lo que nos alegra, o lo que nos agobia, porque las preocupaciones son mucho más ligeras cuando se ponen encima de la mesa, cuando las puedes analizar, y ver con alguien, porque uno solo a veces se centra solo en lo malo, y no ve ninguna otra posibilidad.
-Es muy triste estar leyendo un buen libro, y no tener con quien comentarlo, o leerle un simple párrafo a alguien, para explicarle lo que te sugiere. Mi marido esta mañana me ha leído un párrafo de Mª Antonieta de Stefan Zweig: “El pueblo francés sospecha ya oscuramente, desde hace mucho tiempo, que hay una injusticia que le es infligida, no sabe desde dónde”……
-Mi marido, cree que tiene mucha similitud con lo que nos está pasando a los españoles…..y sentía la necesidad de compartirlo, aunque yo le he dicho, que creo que todo lo nuestro ya está en camino de mejorarse, después de las elecciones autonómicas…….
-La vida nuestra la tenemos que medir, por la huella que dejamos a nuestro paso, por nuestros amores, nuestros amigos, las personas a las que hemos hecho daño, aunque sea sin querer, por el amor, el respeto, la compasión e incluso el odio que hayamos sentido o que hayamos despertado en otros.
-Es muy fácil echar la culpa a los demás de nuestras malas decisiones, hay que asumir que casi siempre hemos elegido nosotros. Por eso, es mejor que en vez de reprocharnos, corrijamos, porque: “El triunfo del verdadero hombre surge de las cenizas de su error.
-En vez de quejarte de tu soledad, enfréntate a la realidad de que son el resultado de tus actos.
-Piensa que la causa de tu presente es tu pasado, y que tu futuro, será lo que tú estás construyendo en tu presente.
-Si eres más optimista, y piensas menos en tus problemas, y tus problemas, desaparecerán, cuando no les hagas caso.
-Nunca tomes decisiones cuando estás enfadado, porque serán malas decisiones.
- A lo mejor, te conviene mirar a tu alrededor de otra manera, porque hay mucha gente que te gustaría si les dieras la oportunidad de conocerte.
-No aplaces siempre todo. Haz lo que debas hacer en el momento preciso, no pospongas.
-No olvides el cuento del barquero, encontrarás en la vida, lo que tú ofrezcas.
-Si te gustaría vivir en un mundo lleno de amabilidad, se amable.
-Si deseas un mundo lleno o de amor, primero da amor a los que te rodean.
-Piensa que si quieres que los demás te escuchen, primero debes escucharles tú.
-Aprende a escuchar, es un arte.
-A compartir, se aprende compartiendo, hay que querer sin exigencias, porque cada uno es como es, y aceptarles con sus imperfecciones, pero sobre todo hay que agradecer todo lo que te dan, y a la vez empezar a dar tú.
- Poco a poco aprenderás, y te gustará, porque dar es muy gratificante.
-Estamos acostumbrados a que nos den, sin que nosotros nunca hayamos dado nada.
-Recuerda que la mejor manera de ser feliz, es ver que hacemos felices a los demás.
-Si estás solo, escoge una buena pareja. El mundo está lleno de gente, si la buscas, la encontrarás, y de ese encuentro te vendrá mucha felicidad.
-¡Tienes derecho a ser feliz!, pero recuerda que las oportunidades nunca vuelven, así que aprovéchalas siempre que te surjan.
-La felicidad es como una hucha, echa todo lo que puedas, y de vez en cuando, recuenta y disfruta de lo feliz que eres.