Ayer por la
mañana, me levanté con ganas de salir a desayunar. Aunque no le apetecía a mi marido ni a mi hijo
Daniel, nos fuimos solas mi hija Gema y yo.
-Hacía mucho
frío, pero era una mañana preciosa. Lo pasamos divinamente. Desayunamos en un
Vips, un mollete de con tomate natural, huevos revueltos y un café riquísimo. Luego
compramos unos libros, y por fin me compré mi agenda.
-Muchas
veces las cosas que nos hacen ilusión, son muy fáciles y sencillas, por eso hay
que hacerlas, porque si empiezas a posponerlas en cuanto te surge algún
problema, se te van pasando los buenos ratitos, y la vida son ratitos…..
- Creo que
debemos intentar tener todas las cosas que nos hacen ilusión, siempre que sea
posible, ya que la mayoría de las veces nuestros gustos son sencillos y son
cosas que nos podemos permitir.
-Tantas
veces cedemos a los gustos de los demás, que acumulamos sin darnos cuenta un
gran saco de” debería haber hecho, esto o lo otro”, que luego solo nos sirven para
sentirnos frustrados.
- Hace
unos 10 años, un amigo de mi marido me confesó una noche que salimos a
cenar con varias parejas de compañeros de trabajo que lo que más sentía no haber hecho en la
vida, era aprender a tocar el arpa ya
que era el sueño de su vida desde que tenía uso de razón.
-Todos se
empezaron a reír a carcajadas. Su mujer le decía que era una obsesión infantil,
y los compañeros de trabajo, le tomaban
el pelo diciéndole lo guapo que estaría tocando el arpa con un traje vaporoso….
-Yo, le dije
que no les hiciera caso que cada uno tiene derecho a tener las cosas que le hacen feliz, y que él, no debía
dejar pasar su vida sin intentarlo.
-Hablamos
largo y tendido sobre el tema, y llegamos a la conclusión de que apuntarse a una clase de arpa, no era nada
inalcanzable ni carísimo, que al menos había que intentarlo.
- Le dije
que en nuestra urbanización habían
abierto una academia de música, que se acercara y preguntara allí, porque al
menos le podían indicar adonde ir si ellos no tenían clases de arpa.
-Aunque
parezca mentira, hace poco he sabido por otros amigos que me hizo caso y se
matriculó en el conservatorio, estudió
arpa, y creo que ha sido un alumno sobresaliente y ahora pertenece a una
orquesta de una coral que toca los fines de semana y que lo hace muy bien.
-Creo que no
debemos ser indecisos con nuestros sueños y con nuestros deseos.
-Perdemos
muchos momentos felices en nuestras vidas por indecisiones, por miedo a decir o
a hacer lo que queremos hacer, que es lo más apropiado para nosotros a pesar de
que a mucha gente no les guste o no les parezca bien.
- Buscaremos
la manera de conseguir ser felices mientras hacemos nuestra vida normal.
-Sabemos que
el mayor error que podemos cometer es no hacer nada que nos haga felices porque
el fin de nuestra vida es la felicidad.
-La gente
feliz es mucho mejor que la triste o la amargada, es más alegre, más generosa,
más colaboradora y más positiva, por eso
intentaremos conseguir la felicidad en
nuestra vida diaria.