jueves, 28 de septiembre de 2017

"Instinto Materno"


El milagro de la vida es algo de lo que todos hemos oído hablar , pero que no sabemos exactamente en que consiste.

-Todos somos hijos de nuestra evolución y venimos a este mundo con una gran carga genética heredada que a veces nos predispone al talento creativo de nuestros padres, abuelos, bisabuelos , tatarabuelos etcétera.

-Las experiencias que vivimos influyen  en la formación de las conexiones cerebrales necesarias para tener esta o aquella habilidad.

-Pero la experiencia nos ha enseñado que la suerte o el destino marcan a veces a algunos con estos o aquellos rasgos  dependiendo del tipo de familia que hemos tenido, del amor que hemos recibido, del embarazo que tuvo nuestra madre y de mil y una pequeñas cosas que nos afectan sin que aparentemente los demás o perciban.

- Lo que se ha demostrado últimamente y comprobado hasta la saciedad  es que existe un “Cerebro Materno”, (y no es ningún invento romántico de foto novela para animar a las chicas jóvenes a tener bebés).

-Los últimos descubrimientos científicos demuestran que las mujeres al ser madres desarrollamos ciertas mejoras cognitivas: El Hipotálamo, La Amígdala y la Corteza Prefrontal aumentan de tamaño después del parto.

-Todas las madres tienen un ansia de  velar por sus hijos, y esto se debe probablemente al crecimiento del hipotálamo , de la  amígdala, y de la corteza prefrontal.

-Las madres  disfrutan interactuando con sus niños, y son muy eficientes razonando, planificando y juzgando todas las cosa que atañen a sus hijos, porque el amor aumenta el cerebro de la madre.

-Los recién nacidos  despiertan inmediatamente en    los  adultos que les rodeamos  el instinto de protección.

 Al ver su cabecita  grande, sus ojitos redondos, su frente prominente, su naricita respingona , su piel suave y su débil  vocecita , nuestra dopamina se dispara haciendo que tengamos sensaciones de felicidad y de serenidad. 

-Los padres también participan en este pequeño milagro. Se ha comprobado que los padres reducen en un tercio su nivel de testosterona las semanas siguientes al parto de su hijo, y al tener menos testosterona de la que tienen normalmente, se vuelven muchísimo más maternales y menos agresivos.

-Esto  no afecta negativamente a sus relaciones de pareja, ya que  en esos días, las mamás están  tan pendientes de su bebé que no parecen tener demasiado interés por el sexo.

-Los padres jóvenes que están compartiendo los cuidados del bebé dicen que nunca nadie  les había dicho nada sobre el enorme placer y el gozo que sentirían al tener entre sus brazos a su pequeñín recién nacido.

-Esto probablemente sea:” El verdadero milagro de la vida”.


-Buenas noches