El milagro de la vida es algo de lo que todos
hemos oído hablar , pero que no sabemos exactamente en que consiste.
-Todos somos hijos de nuestra evolución y
venimos a este mundo con una gran carga genética heredada que a veces nos
predispone al talento creativo de nuestros padres, abuelos, bisabuelos ,
tatarabuelos etcétera.
-Las experiencias que vivimos influyen en la formación de las conexiones cerebrales
necesarias para tener esta o aquella habilidad.
-Pero la experiencia nos ha enseñado que la
suerte o el destino marcan a veces a algunos con estos o aquellos rasgos dependiendo del tipo de familia que hemos
tenido, del amor que hemos recibido, del embarazo que tuvo nuestra madre y de
mil y una pequeñas cosas que nos afectan sin que aparentemente los demás o
perciban.
- Lo que se ha demostrado últimamente y
comprobado hasta la saciedad es que
existe un “Cerebro Materno”, (y no es ningún invento romántico de foto novela
para animar a las chicas jóvenes a tener bebés).
-Los últimos descubrimientos científicos
demuestran que las mujeres al ser madres desarrollamos ciertas mejoras
cognitivas: El Hipotálamo, La Amígdala y la Corteza Prefrontal aumentan de
tamaño después del parto.
-Todas las madres tienen un ansia de velar por sus hijos, y esto se debe
probablemente al crecimiento del hipotálamo , de la amígdala, y de la corteza prefrontal.
-Las madres disfrutan interactuando con sus
niños, y son muy eficientes razonando, planificando y juzgando todas las cosa
que atañen a sus hijos, porque el amor aumenta el cerebro de la madre.
-Los recién nacidos despiertan inmediatamente en los adultos que les rodeamos el instinto de protección.
Al ver su cabecita grande, sus ojitos redondos, su frente prominente, su naricita respingona , su piel suave y su débil vocecita , nuestra dopamina se dispara haciendo que tengamos sensaciones de felicidad y de serenidad.
-Los padres también participan en este pequeño
milagro. Se ha comprobado que los padres reducen en un tercio su nivel de
testosterona las semanas siguientes al parto de su hijo, y al tener menos
testosterona de la que tienen normalmente, se vuelven muchísimo más maternales
y menos agresivos.
-Esto no afecta negativamente a sus relaciones de
pareja, ya que en esos días, las mamás
están tan pendientes de su bebé que no
parecen tener demasiado interés por el sexo.
-Los padres jóvenes que están compartiendo los cuidados
del bebé dicen que nunca nadie les había
dicho nada sobre el enorme placer y el gozo que sentirían al tener entre sus
brazos a su pequeñín recién nacido.
-Esto probablemente sea:” El verdadero milagro de
la vida”.
-Buenas noches