¡Cada vez están más cerca las Navidades!
-Lo que da más estrés es cuando se acerca la
Nochebuena y no sabes dónde vas a cenar
ni cuantos comensales os reuniréis.
- Cuando
vivían nuestros padres, nunca había que preguntar, porque mamá era muy generosa
y acogedora y siempre nos esperaba a todos en casa, con suegras incluidas.
-Ahora que somos nosotras las organizadoras, no
paramos de sorprendernos de la alegría con la que nuestra madre nos recibía, sin importarle
poner mesas supletorias y sillas de tijera con tal de que todos tuviéramos
sitio.
-Cuando faltan las madres la familia se queda
descolocada, porque ella es el motor que nos da energía a todos, por eso
nosotras, las tres hermanas decidimos al
faltar ella, seguir reuniéndonos todos los años como siempre hemos hecho.
- Como somos tres hermanas, cada una se encarga
de sus platos y de sus compras , y luego nos juntamos las tres con nuestras
familias, en la casa que toque a celebrar.
-Este año me tocaba a mí la Nochebuena , pero mi
hijo Félix ha dicho que no me preocupe, que la cena la haremos en su casa, así
que me ha quitado un enorme trabajo de encima.
-Asaré el cordero en el horno y lo llevaré a casa
de Félix. Mari Jose cocerá los langostinos y preparará los aperitivos, Félix,
asará en su horno las lubinas y Mima se encargará de los dulces navideños.
-Vamos a hacer un amigo invisible para que todos
y cada uno tengamos un regalito sorpresa.
-Pondremos un mínimo y un máximo de euros para
cada regalo, porque así nos evitamos las desigualdades.
-Reunirse en Navidad es una de las cosas que más
alegría nos produce, porque nos juntamos solamente para charlar y divertirnos
alrededor de una exquisita cena.
Diremos en voz alta nuestro mayor deseo para el
año nuevo y seguro que nos vamos a sorprender de algunos de ellos.
-Buenas noches.