jueves, 19 de septiembre de 2013

"Amigos Sin Rencores"


Tenemos que saber aceptar que los amigos cambian ,  y que probablemente ellos se darán cuenta de que también nosotros hemos cambiado.

-A veces los amigos no se comportan como nosotros querríamos que lo hicieran, y nos disgustan y nos enfadan, pero un buen amigo, será siempre un buen amigo a pesar de las cosas que sucedan….

-El otro día durante una comida, un chico joven, comentaba que estaba profundamente desilusionado porque su gran amigo, se había separado y se había ido a trabajar a Holanda, Y aunque al principio se mantuvieron en contacto, poco a poco dejó de contestar a los e-mail, y estuvieron casi  un año sin comunicarse.

-El otro día, por lo visto, le mandó un correo urgente diciéndole que iba a estar en Madrid dos días y que tenía ganas de verle. El chico, nos dijo que no pensaba quedar, que estaba harto de lo mal que se había portado, y que le iba a decir que tenía un compromiso de trabajo….

-Yo, que soy amiga de su familia y le conozco muy bien, le dije que no tomara decisiones con su “ego” herido, que hay que ser comprensivo con los amigos, y que una gran amistad, continúa creciendo aunque haya grandes paréntesis, y que no puede tirarse por la borda sin aclarar las cosas cara a cara, y no puedes permitir aunque tengas motivos para estar enfadado que un momento de ira os cause un dolor de por vida.

 -Se quedó mirándome muy pensativo, y me dijo que  me haría caso y  le vería aunque solo fuera  porque habían sido amigos durante tantos años…

-Esta tarde, me ha llamado para  darme las gracias por mis consejos, y para contarme que salieron a cenar, y que lo pasaron de maravilla; que al rato, ya habían aclarado las cosas y que estaban exactamente donde lo dejaron;  que hacía años que no se reía tanto y con tantas ganas, en fin que se alegraba mucho de haber cedido….

 - Me ha contado que  su amigo tiene una novia holandesa simpátiquísima; porque los holandeses son los andaluces del norte de Europa, y  está muy feliz,  aunque creo que le ha costado muchísimo enderezar y organizar de nuevo su vida., así que la próxima vez , se reunirán  con las mujeres…

-Siempre debemos reflexionar antes de juzgar a nadie, y mucho menos a un amigo sin tener los datos suficientes para opinar sobre lo que le puede haber pasado, o sobre cómo se siente.

-Tenemos el deber de controlar nuestros impulsos, porque nuestro “ego herido” nos puede jugar una mala pasada.

-Un buen amigo tiene el deber de esperar a conocer bien las circunstancias del otro  antes de juzgarle, y si le ves confundido o errado, deberás escucharle, aconsejarle, ayudarle, y cuidar mucho tus palabras para no  ser cruel en los malos momentos…


-Me alegro mucho de que una amistad y un cariño de tantos años no se pierda