Nosotros somos los protagonistas de nuestra propia
historia, por eso tenemos que ser conscientes de nuestra importancia, y nos pondremos en
acción para conseguir lo que queremos y vivir más plenamente.
-A lo mejor necesitamos hacer un guión para que
nada de lo que queremos se nos quede en el tintero sin haberlo intentado.
-En esa lista tan práctica pondremos los valores
que nos gustaría tener; y cuando estemos seguros de lo que queremos conseguir,
actuaremos como si ya los tuviésemos.
-Reflexionaremos sobre nuestro “don”, ese don que todos poseemos, y
que pasan desapercibidos porque estamos acostumbrados a ellos y no les valoramos.
-Muchas personas cocinan de maravilla, y no
creen que eso sea un don especial, y si lo es, porque cocinar bien , consiguiendo con 4 cosas una comida
exquisita , es un don excepcional.
-Una vecina de casa, se vio de la noche a la mañana
abandonada por su marido que la dejó por
una chica más joven…..
- Su marido la obligó a dejar su trabajo hace 15
años, cuando se casaron, para cuidar de él , de su casa y organizar sus cenas y comidas de empresa; así
que estaba perdida y desolada sin saber que iba a hacer para subsistir.
-Una noche , unos cuantos vecinos , fuimos a cenar
a un restaurante italiano- pizzería que acababan de abrir en nuestra urbanización , y pedimos de postre diferentes
tartas.
-La cena estuvo muy bien , pero las tartas eran
todas malísimas, así que yo le dije al dueño que como era posible que pusiera
unas tartas tan malas que desprestigiaban la comida tan rica del restaurante; y me contestó que no había
encontrado ningún distribuidor mejor: así que yo le dije que hablaría con una amiga que hacía
unas tartas exquisitas, con productos de primera calidad y que ya le diría algo.
-Al llegar a casa, fui a ver a mi vecina y se lo
conté, animándola a que hiciera 1 tarta de manzana, otra de chocolate, una de
yema tipo San marcos y una fresca de fruta , que yo la acompañaría a llevársela
al de la pizzería al día siguiente.
-Resumiendo, le gustaron tanto las tartas , que se las quedó todas, y le pagó
por cada una un precio mayor del que ella pedía, con la condición de que
siempre usara los mismos productos de calidad y que siguiera siendo casera.
-Actualmente esta señora goza de una magnifica posición y ha montado un catering que sirve
comidas a domicilio gracias a un don que ella nunca había valorado.
-Buenas noches.
