Si al mundo le mostramos mala cara, nos va a devolver un
poco de lo mismo, por eso, creo que todos deberíamos intentar ponerla buena, para
que los demás nos la pongan.
-Todos tenemos gente alrededor criticona y desconfiada que
solamente tiene una lectura negativa de cualquier cosa buena que nos haya pasado,
y nunca les sale decirte que se alegran
de que esto o aquello te vaya bien.
- Yo les llamo “amargados crónicos”. Dice el refrán que “El
ojo enfermo, todo lo ve negro”.
-En mi lista de deberías, voy a añadir. -¡poner en mi Hotmail,
“Correo no deseado” que significa que no se acepta!, que ahora no me acuerdo
cual es, porque cada vez que leo uno suyo, me dan ganas de llorar, o de mandarle
adonde se fue el Padre Padilla.
-En cambio, también tenemos amigos que se alegran tanto de
cualquier cosa buena que nos pase que parece que les está pasando a
ellos. Amigos o hermanos, o hijos, esos son los que tenemos que tener en cuenta,
y no hacer caso a los malos
-Los niños son los que llevan el corazón en la cara, y se
alegran tanto de las cosas que vivir experiencias a su lado, si te fijas un
poco es como volver a vivir……
- La sonrisa de los niños, es algo tan resplandeciente que
llena una habitación; así que los mayores, también tenemos que sonreír mucho,
porque la sonrisa es muy contagiosa, y así contagiaremos felicidad
-Mi nieta Natalia de tres años y medio, estuvo ayer en casa con su hermano Alvarito de dos años, y mi
hija Gema, les puso en una mesa chiquitita a pintar en la cocina, porque pintan
con tanto afán, que ni Kandisky en sus momentos creativos, tenía tanta marcha,
y salta la pintura por todas partes. Bueno, pues como estaba pasándoselo tan bien,
y se sentía tan feliz, que cada ratito se levantaba y me abrazaba diciéndome:-“Abuelita,
te quiero mucho”……y yo, como os podéis imaginar, me sentía como una reina.
-Yo suelo sonreír mucho, porque me gusta la gente y la vida,
y noto que la gente casi siempre te devuelve la sonrisa, por eso de que son
nuestro espejo.
-La madre Teresa de Calcuta, decía unas frases que me encanta,
y os las voy a copiar:
-Sonríanse unos a otros.
-Sonrían a su esposa, a su marido, a sus hijos, a quien sea.
Sonreír nos ayuda a crecer en amor por los demás.
-Ángeles, una amiga mía muy optimista, te manda los correos
con animaciones de sonrisas, y la
verdad, es que sin darte cuenta ya sonríes y te alegras al leerlos.
-Hay gente que no sonríe porque piensa que sonreír arruga, y
tienen una auténtica gerontofobia, que
es terror a envejecer.
-Yo pienso que llegar a viejo, es señal de que has vivido y un gran logro. ¡Ojalá pueda
llegar yo a ser una viejecita como la señorita Marple de Agatha Christie, que
es una anciana optimista e idealista a pesar de su edad, que vive en St Mary Mead, un precioso pueblo
donde todo el mundo la conoce , la admira y la quiere.
-A la Srta. Marple, como a mí, le encanta hablar con la
gente, y así poco a poco ha ido aprendiendo a lo largo de su larga vida, que la
vida va repitiendo y repitiendo personajes y comportamientos; por eso unas
personas de esta época, la recuerdan a otras que conoció en su juventud, y así
ha ido aprendiendo muchas lecciones sobre la naturaleza humana.
-la frase favorita de ella es: “La gente es igual en todas
partes”