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celebró ayer 14 de abril, con un “doodle”, el centenario del nacimiento del
famoso y revolucionario fotógrafo francés Robert Doisneau.
-Fue un
fotógrafo absolutamente autodidacta, que aprendió a revelar siguiendo las instrucciones
que venían en los prospectos de las cajas de los productos de revelado.
-En 1929,
comenzó a hacer
sus primeras fotografías, y trabajó en un estudio fotográfico que compró al morir su dueño.
sus primeras fotografías, y trabajó en un estudio fotográfico que compró al morir su dueño.
-Trabajó con
el escultor, pintor, y, fotógrafo André
Vigneau, que fue quien le introdujo en un tipo de fotografía artística.
-Tuvo una
vida muy interesante, trabajó en Renault como fotógrafo industrial y también
realizo fotos publicitarias en la factoría, pero le acabaron despidiendo por su
carácter anárquico que le obligaba a faltar y a desobedecer las normas.
-Más tarde
empezó a hacer fotografías en las calles de París, de
gente corriente, yendo a sus trabajos, mercados, colegios……
-Le gustaba
plasmar escenas de la vida cotidiana, pero eran muy originales, porque tenían movimiento,
y n o daba la impresión de que estaban
posando.
- Retrató a
muchos famosos entre ellos a Pablo Picasso.
-En 1950,
llegó su gran oportunidad, cuando la revista America ´s Life, interesada en los enamorados de París, le encargó unas fotos.
-Realizó una
serie de fotografías a las que llamó Besos,
una de las cuales. Titulada “El beso”, le lanzó a la fama, a la vez, que
consagró a París como la ciudad del amor.
- Esta foto
que se ha reproducido millones de veces en posters, carteles y postales, aún sigue representando
el amor con mayúsculas que se puede vivir en París, mejor que en ningún otro
sitio, y adornando miles de dormitorios
de jóvenes románticos.
-La
fotografía que todo el mundo pensó que había sido hecha al azar a una pareja de
enamorados que celebraban la alegría de reencontrarse delante de la plaza del
Hotel de Ville ,( el famoso ayuntamiento parisino), fue en realidad un posado de
unos novios, estudiantes de Arte Dramático llamados
Francoise Bornet, y Jacques Carteaud, a quienes el artista descubrió sentados
en un romántico café parisiense, y aceptaron posar para él dándose un
apasionado beso de amor entre el bullicio de la plaza.
-Hizo una
serie de fotos a la pareja, pagándoles por posar y estas le sirvieron de prueba
cuando los protagonistas le denunciaron, porque pretendían cobrar un porcentaje por ellas, al ver lo
famosas que eran sus fotos.
- El juez,
les dijo que habían cobrado en su momento un dinero por hacer un trabajo, y que
encima, les había regalado una copia de
cada foto en la que eran los protagonistas, y que esa fotos, tenían en la parte
posterior el sello del fotógrafo, y
precisamente por eso, no tenían derecho a nada más.
-Un
coleccionista caprichoso al enterarse de que poseían una copia de la verdadera
foto, se la compró por 155.000 euros en 1992, que es mucho dinero
Esa foto le dio
fama mundial, y da exactamente igual que fuera un posado, ya que es una foto
magnífica.