He leído esta mañana
en el periódico “El Mundo” que “La recogida de tapones solidaria”, empezó en
Lekeitio (Vizcaya).
- Los padres de un
pequeño de 11 años llamado Ronan que sufría un una distrofia muscular
degenerativa (que poco a poco le iba dejando impedido),
necesitaban urgentemente
dinero para comprarle un aparato llamado bipedestador que sirve para ponerle de pié, para que sus órganos se puedan poner en su posición natural, al menos un ratito todos los días.
dinero para comprarle un aparato llamado bipedestador que sirve para ponerle de pié, para que sus órganos se puedan poner en su posición natural, al menos un ratito todos los días.
-Así que, llegaron a
un acuerdo con una empresa francesa de reciclaje, y llamaron a la solidaridad
de sus vecinos pidiéndoles que no tiraran los tapones al vaciarse sus envases,
sino que los llevaran a un contenedor, para así poderlos vender y sacar dinero
para una buena causa.
-Si nos cuentan que
por 300 tapones que pesan más o menos 1 Kilo, les pagan solamente 0,3 euros,
pensaremos que es una miseria, pero como los españoles somos muy solidarios, en
pocos meses, han reunido tapones suficientes para poder pagar los 9.000 euros
que vale el aparato, y que Ronan Gracias a Dios, ya está disfrutando.
-La noticia ha corrido
como la pólvora, y en todas las provincias españolas hay puntos de recogida de
estos tapones que van a servir para ayudar a diferentes niños que sufren
enfermedades graves, y que necesitan dinero para operarse en otros países como
es el caso de Aitana que sufre una grave cardiopatía que solamente se puede
operar en EE:UU y que cuesta 250.000 euros.
-Hay muchos padres de
niños que padecen terribles enfermedades, a las que aún no han puesto
nombre, y quieren que el dinero recaudado de sus tapones, sea para la
investigación de su enfermedad.
-Miles y miles de
niños, se han incorporado a la lista de peticiones, así que todos tenemos que
contribuir con los tapones que tirábamos cada día en casa.
-Nosotros en casa,
hemos puesto una bolsa en el tendedero, y allí vamos echando los tapones
que tenemos cada día, y luego los llevamos al Centro Comercial “La
Vaguada” a una tienda de telefonía situada en la planta baja, que
ha puesto un contenedor de tapones.
Sirven todos los
tapones de plástico de las botellas y los brick que gastamos, parece que
son pocos, pero gotita a gotita, se reúnen toneladas que se venden, y se va
consiguiendo dinero para ayudar a estos niños.
-Parece una tontería,
pero entre los de la leche, las bebidas de cola, los refrescos, son bastantes
los que podemos reciclar cada día.
-Además de ayudar en
una causa maravillosa, ayudamos a reciclar plástico, que es un asesino para
nuestro planeta, y se aprovecha introduciéndose en la cadena productiva
“inyectando plástico en juguetes, mobiliario urbano y envases”.
-Están colaborando
colegios, empresas, asociaciones y ciudadanos de a pié que sienten en su piel
el dolor de estas familias.
Esta es la dirección e-mail donde
os aclararán cualquier duda sobre este tema, pues han hecho una cadena de
cariño, formada por personas generosas y solidarias de las que todos nos
tenemos que sentir orgullosos.