Resulta que
el mundo está mal, y al decir el mundo, no nos referimos a la Tierra, sino que
hablamos de los siete mil millones de habitantes que vivimos en los cinco continentes.
-Vamos a
pensar como lo haría un niño, que según Albert Einstein, “son las mayores
inteligencias vírgenes que producen los mejores razonamientos”.
-También
dijo que “Si buscas resultados distintos, no hagas siempre lo mismo”.
- Si el
mundo está mal, es porque la gente está mal, luego para arreglar este mundo tan
maltrecho, lo primero que tenemos que hacer es conseguir que las personas
hombres, mujeres y niños se comporten bien, ya que si todos nos portamos bien,
el mundo funcionará mucho mejor.
-Lo más fácil
es evadir nuestra responsabilidad y echar la culpa a los demás, al país, al
gobierno, al jefe, al profesor , a los padres…..
-Vamos a
jugar a hacer como si todos fuéramos tan buenos como deberíamos ser, y
enseguida veremos que el mundo funciona mucho mejor.
-Ninguno de
nosotros puede vivir sin querer y sin que le quieran, así que vamos a ser
cariñosos con los de nuestro alrededor, no consintiendo decir ni que nos digan
malas palabras.
-Nunca
cogeremos lo que no es nuestro y no nos corresponde, ni consentiremos que
nuestros amigos y familiares, lo hagan,
a pesar de que sabemos que hay gente ladrona que lo hace….
-Aprenderemos
a disfrutar de las pequeñas cosas a ratitos, porque en el fondo, la vida son
solo ratitos.
-Veremos que
el tiempo es un gran maestro que pone a cada uno en su sitio, y nosotros estaremos
en un buen sitio porque nos lo
merecemos.
- La vida es
maravillosa y tenemos que aprender a valorarla.
-Desde por
la mañana valoraremos las cosas que tenemos y daremos las gracias por todas
ellas.
-Si queremos
encontrar amistad, primero tendremos que ser amistosos.
-Valórate a ti
mismo, y así podrás valorar a todos los demás.
-Si quieres
ser feliz como me dices, “No analices”.
-No guardes
rencor que es un fruto podrido que te contaminará.
-Perdona al
que te ofendió y tenle lástima.
-La mejor
recompensa es tener a tu alrededor a gente feliz que te quiere.
-Acostúmbrate
a ser amable, porque la sonrisa y la amabilidad alegran el mundo.
-Y no
olvides lo que decía la famosa actriz
Audrey Hepburn, que la mejor crema antiarrugas es una gran sonrisa.
-Cada vez
que nos reímos añadimos dos días a nuestra vida.
-La
verdadera felicidad, siempre está en las cosas pequeñas.
-¡Disfruta
cada día!