Estamos rodeados de personas controladoras que
se dedican a dominarnos aunque sea a
distancia, para que nos comportemos según sus normas.
-Las personas controladores, pueden ser hombres
o mujeres, jóvenes o mayores, y tener con nosotros vínculos románticos,
familiares o simplemente de amistad.
-Cuando una persona controla a otra, es porque
la otra se deja controlar, pero no es tan sencillo como parece, ya que las
personas controladoras, suelen ser sutiles , y tienen el mando, sin que muchas
veces, las personas a las que controlan, lo noten.
-Últimamente he charlado con varias mujeres que
están tan controladas por sus maridos, hijos, y hermanas, que se ve a la legua
que tienen una relación de dependencia bastante insana.
-Podemos darnos cuenta de que una persona es
controladora, fijándonos atentamente en una serie de señales que emiten:
-Pueden ser personas celosas, personas que
quieran darte normas de cómo debes peinarte, arreglarte, de cómo debes gastar tu dinero, de cómo debes
emplear tu tiempo, cómo debes comer…..quieren que actúes según la imagen que
ellos te marcan, no de la manera que quieres hacerlo tú.
-Si detectas alguna o muchas de estas cosas en
alguien cercano a ti, no lo dudes, has
caído en manos de una persona controladora.
-El problema a veces, reside en que hemos
crecido en un hogar donde había un gran control por parte de 1 o de varios
miembros de nuestra familia, y entonces , hemos estado creyendo que era un comportamiento
normal.
-Ahora que somos adultos, ya tenemos manera de
detectarlo y de no consentirlo, porque si estamos controlados por otro, nunca
seremos felices, puesto que la felicidad pone alas en los pies como el amor, y nos hace sentirnos libres.
-Parar a un controlador, no es fácil, ya que
suelen ser personas narcisistas, con mucho genio, incluso con accesos de ira, que
creen estar en posesión de la verdad,y que es su obligación dirigirnos porque estamos equivocados y no podemos hacerlo solos.
-Muchas veces consiguen separar a familias bien
avenidas, y a amigos de muchos años convenciéndoles con
sus líos y cuentos.
-Una de las armas de estas personas cuando se
ven descubiertas es sentirse molestos
y dolidos, haciéndose las víctimas para
que las otras personas se sientan
culpables, y duden .
-Hay que separarse de las personas
controladoras, porque son tóxicas y nos perjudican tanto física como
emocionalmente. Si son amigos, dejaremos
poco a poco la amistad, pero si son familiares directos, como cónyuges, padres
, hijos o hermanos, no tendremos más remedio que decírselo, o pediremos a otro
que haga de intermediario y les comunique que ya no vamos a consentir más ese
control, o pediremos ayuda profesional a un psicólogo.
-Somos personas inteligentes con libre albedrío
para decidir qué hacer, con todo el
derecho a tomar decisiones, y con madurez para asumir nuestros errores cuando
nos confundamos, ya que la vida es una escuela, y a veces aprendemos de
nuestros errores.
- -Marcaremos los límites, de lo que es y lo que
no es aceptable para nosotros; porque el
problema del control, es de ellos no nuestro, y notaremos en cuanto nos distanciemos que estamos contentos y que nos sentimos
ligeros como si nos hubiésemos quitado un gran peso de encima.
-Buenas noches