Somos hijos de nuestra evolución y tanto nuestro
cuerpo como nuestro cerebro están programados para buscarnos entre nosotros y
cuando estamos reunidos , nos sentimos más felices.
-Desde que nacemos nuestra madre interactúa con
nosotros, nos acaricia, establece con nosotros un vínculo muy fuerte a través
del contacto piel con piel, nos alimenta
y nos cuida.
-A pesar de todo, muchas personas prefieren estar solos y no
quieren vivir en comunidades ni pertenecer a ningún grupo, aunque se sientan
solos y algo tristes.
-Todos queremos ser felices pero no estamos
programados para serlo, sino para buscar la felicidad.
-Todos queremos encontrar la felicidad, y como
Dorothy en “El Mago de Oz”, vamos por el camino amarillo para encontrarla.
-La culpa la tiene un pequeño neurotransmisor,
la dopamina que nos empuja a perseguir el placer y la recompensa.
-La dopamina se mueve a través del sistema de
recompensa y el lóbulo frontal, que es
la región cerebral más lenta de madurar, y la que más se deteriora en la vejez.
-Es la responsable de que recordemos el pasado y
vivamos el futuro antes de que llegue.
-Pensamos con anticipación en lo que nos va a
suceder y esto nos hace ser felices o desgraciados , según suceda.
-Solemos exagerar en nuestros pronósticos y
pensamos que lo malo será muy malo y lo bueno, buenísimo.
-Actualmente, en estos tiempos de crisis, una
gran parte de las personas cree que para ser felices hay que tener un buen trabajo que nos permita
casarnos , tener hijos y vivir con
desahogo económico.
-Lo que si está comprobado es que las personas
sociables que se reúnen a menudo con sus amigos, son mucho más felices que las
solitarias.
-Pero sabemos que esta felicidad depende de
nosotros, porque cuanto mejor sintonizado esté nuestro sistema nervioso, mejor
nos relacionaremos con los demás y esto nos dará felicidad.
-Estamos programados para interactuar con los
demás y nuestro cerebro está programado para funcionar como un grupo social.
-Al ser seres sociales, sentimos empatía,
sincronía, y somos capaces de captar gracias a las neuronas espejo, el estado
emocional de los otros, y sus intenciones.
-Una de las cosas más prácticas y que nos dan
más felicidad, es saber que tenemos apoyo social, que somos vistos y escuchados
por los nuestros, esto es básico para calmarnos , curarnos y crecer, esto nos
proporciona la sensación visceral de seguridad.
-Buenas noches.