Hoy es el día de la salud, el día después del sorteo
de la Lotería de Navidad.
-El que más y el que menos , casi todos hemos
gastado como cada Navidad, mucho más de
lo que deberíamos, con la secreta esperanza de que nos va a tocar , y de pronto
¡Zas!, sale el gordo, y vemos aterrorizados que no tenemos ni un décimo que
acabe en 8.
- Nos empezamos a preocupar cuando oímos que el segundo
y el tercer premio acaban en 4, y ¡tampoco tenemos ninguno con esa
terminación!, así que decidimos esperar a esta mañana y verlo tranquilamente
mientras desayunamos en la lista del periódico.
-Las amigas con las que compartimos números y la
familia, no paran de llamarnos
diciéndonos que no nos ha tocado
nada, pero nosotros no queremos interiorizar ese mensaje tan negativo para no
darle poder, así que nos refugiamos en la secreta esperanza de que a lo mejor
alguno de nuestros números esté en la pedrea.
-Esta mañana todos los pronósticos gafes se han confirmado, no nos ha tocado ni
un solo euro, así que pensaremos que gracias a Dios tenemos salud.
-Es muy divertido cuando estamos un grupo de
amigas reunidas preguntarles lo que
harían si les tocara un premio verdaderamente importante.
-Las respuestas son tan diferentes, que al
oírlas nos sorprendemos de que a pesar de que
llevamos muchísimos años de amistad, no nos conocemos en profundidad.
-La gente se iría
a vivir a Hawai, le darían todo el dinero a sus hijos, viajarían a París, pagarían hipotecas, se harían cirugía estética, dejaría de trabajar para
tener otro hijo…etc.
-Una de las cosas que más me han sorprendido ha
sido el saber que a los 10 años como máximo, la mayoría de personas a las que
les ha tocado el gordo, están en una posición inferior a la que tenían el día
del premio, muy arrepentidas de la
manera en la que lo han gastado.
-Así que nos consolaremos pensando que tenemos
salud , y que gracias a Dios vivimos bien , aunque probablemente las próximas
navidades caeremos en la misma trampa.
-Buenas noches