Chito es un pescador costarricense de 51 años,
es uno de los hombres que ha sido capaz de domesticar a un cocodrilo gigante.
-Le encontró moribundo en el río Parismina, en la zona del Caribe hace más de 20 años cuando estaba pescando, y le vió tumbado en
la orilla por un balazo de un de un ganadero , en venganza porque se había
comido sus terneros en la orilla , y no fue capaz de cruzarse de brazos ante el
peligroso animal, sino que sintió su dolor y decidió curarlo.
-Le subió con muchísimo esfuerzo a su lancha,
pensando en aprovechar esa piel tan valiosa, pero al tenerlo allí , y verlo tan
enfermo, decidió curarlo.
-Al principio tenía mucho miedo , y era durísimo
tocarle, a pesar de que estaba delgado y desnutrido; tenía unos dientes
terribles, pero con cuidadito, y poco a
poco, le fue alimentando con pollos, y cada día veía como se recuperaba un poco más hasta
conseguir sus 5 metros de largo, y 445 kg de peso aproximadamente.
-Le cuidó con cariño, le empezó a acariciar y a
hablar para tranquilizarle, y le llamó “Pocho”,
le alimentó hasta que se recuperó
totalmente, y durante su convalecencia, se fue creando una red invisible de
amor y complicidad que cada día se hace más fuerte.
-Por las noches le invitaba a meterse al agua
con él, y cuando lo hizo, sintió una gran emoción porque notaba que era su
amigo.
-Tardaron tres años en conocerse, pero ahora Chito,
entiende sus miradas y nota que se le acerca cuando se siente a gusto.
-Juegan juntos, y se atreve a cabalgar en la parte posterior, sobre él como si se
tratara de un pony.
-Ha comprobado que es un animal sensible, y a veces se emociona al verle; le parece que
nota que le quiere y con el siempre estará a salvo, por lo que han creado un
vínculo entre ambos .
-Ha montado un espectáculo para sacar dinero para su
manutención , y para que la gente lo vea, y ahora viajan desde todo Costa Rica
miles de personas incrédulas que sueñan con ver a “Tarzán Tico”, nombre artístico de Chito con
su cocodrilo gigante Pocho.
-Pocho come entre 6 y 8 pollos y pescados 3
veces en semana, y calculan los veterinarios que tiene 50 años, por lo que le
quedan al menos 30 años más .
-Cuando le da pescado, le golpea con el pez, para
que recuerde cuando pescaba solo y él abre su bocaza con 70 dientes y lo coge
sin lastimar a Chito.
-Buenas noches