Estos días, mi hijo Daniel está muy triste, porque se ha muerto David, el padre de sus queridos amigos Ana y Victor.
-David, era hablador y simpático. Una persona muy activa, y muy católico, que solo por unos días no pudo ver al Papa, ni a los jóvenes voluntarios, cosa que estamos seguros de que le hubiera hecho una gran ilusión, ya que él siempre que podía, daba testimonio de su fe, en estos tiempos en los que tanta gente, parece no creer en nada, y no comprometerse con nada Le gustaban mucho los americanos, los conocía muy bien, ya que había trabajado mucho con ellos, y le habían dejado un buen recuerdo.
-Con Daniel, hablaba de París, ya que lo conocía bien, y se acordaba mucho de sus visitas al famoso “Mercado de las Pulgas”, y también de las francesas.
-Le encantaba escuchar a Cesar Vidal en la radio, y le acompañaba todas las noches.
-Se puso contentísimo, cuando Daniel le regaló una taza firmada por él.
-Apreciaba el buen vino, entendía mucho, y disfrutaba tomándose una copa, mientras su salud, se lo permitió.
-Quería muchísima a su nieto David, y este no solo le correspondía, sino que era al único al que escuchaba, en estas edades tan complicadas de la adolescencia.
-David, se ha ido mucho antes de lo esperado.
-Lo peor de los padres, es que se nos mueren como dice Isabel Allende, mucho antes de que podamos retribuirles parte de lo que han hecho por nosotros.
-Se mueren dejándonos desvalidos, culpables, e irremisiblemente huérfanos.
-La vida, cuando se muere un padre, nos parece muy triste e injusta. Todos pasamos una gran parte de nuestra vida, pensando que nuestros padres siempre estarán con nosotros.
-Desgraciadamente, cuando menos lo esperamos, nos dejan huérfanos de su cariño, de su consejo, de su comprensión y compañía, que será irremplazable.
-la vida sigue, y conoceremos y trataremos a muchas personas, que entrarán en nuestras vidas y que serán irremplazables para nosotros, que nos querrán, y que nos acompañarán, pero nuestros padres, nos dejarán para siempre una añoranza permanente, y en muchas ocasiones, la vida se nos hará cuesta arriba, por estar separados de ellos.
-Los que queremos a Ana, Victor y David jr, les deseamos mucha fuerza para sobrellevar esta gran pérdida, pero les anticipamos,( los que ya hemos pasado por ello), que la vida sigue, y que seguirá habiendo buenos momentos, les deja muy buenos recuerdos aunque le añoren y nunca le olviden, porque vivir con él, ha valido la pena.
-Los que creemos en otra vida futura, sabemos que se ha reunido con muchos seres queridos, que fueron hacia esa vida antes que él, y tenemos la seguridad de que les cuidará, tanto a su querido nieto David, como a sus hijos, y que se alegra de todas las cosas buenas que les pasen, ayudándoles y dándoles mucha fuerza para seguir adelante.
