Decía Albert Einstein: “La imaginación es más importante que el conocimiento. El
conocimiento es limitado, pero la imaginación rodea al mundo”. Es tan
importante que nos acostumbremos a imaginarnos las cosas, como que de ello
depende en gran medida que sucedan o no.
-Todos los grandes genios, y los grandes creativos, primero
se han imaginado las cosas, las han visto con su imaginación, y luego las han
pintado, escrito, interpretado……pero siempre primero todos lo habían imaginado.
-Es duro reconocer que a la mayoría de los seres humanos les
resulta muy fácil imaginar desgracias, y eso es tan malo y tan perjudicial para
la salud, como vivirlas. Son personas que sin darse cuenta se han instalado en
la queja, y ya se dedican sin darse
cuenta a quejarse de todo y de todos, y este comportamiento tan pueril y tan
limitante, perjudica también a los que tenemos la desgracia de ser sus
interlocutores
-En los estudios de imagen cerebral, han comprobado que
cuando una persona recuerda o imagina un hecho terrible, su cerebro lo procesa
como una experiencia real. Las personas que se pasan la vida contando
desgracias, se someten a un estrés gratuito y enormemente perjudicial.
-Si tenemos ilusión por algo, lo que tenemos que hacer es
relajarnos e imaginarnos que ya lo tenemos,
utilizando si es posible la mayoría de los cinco sentidos para
recordarlo mejor y grabarlo en nuestro subconsciente.
-Tenemos que hacer la prueba, e imaginarnos que ya tenemos
ese trabajo tan deseado, que nos llaman y nos lo notifican, notamos la alegría,
la emoción de haberlo conseguido, nos vemos llamando a nuestras personas
queridas y diciéndoselo.
-Una amiga mía fue a la consulta de un psicólogo porque a la semana siguiente tenía una entrevista de
trabajo que llevaba mucho tiempo esperando. Estaba tan nerviosa, que no se
sentía capaz de ir, sabía que se iba a quedar en blanco, que la sudarían las
manos y no podría articular ni una palabra.
- La psicóloga, la mando relajarse, y juntas se imaginaron
el edificio donde tendría lugar la entrevista, veían un reloj que marcaba
claramente la hora. Ella se visualizó con un traje pantalón azul marino que se
había comprado recientemente para esos casos, y también vio claramente que con
la blusa y los zapatos, ofrecía un aspecto impecable.
-Hablaron sobre el tipo de preguntas que la harían, y la
psicóloga la dijo una serie de frases comodín que debía contestar.
-El día de la entrevista ella estaba contenta y serena, y
todo resultó de maravilla. Cuando se iba a marchar, uno de los jefes que la
habían estado entrevistando, la paró un momento para preguntarla que a qué se
debía esa sonrisa que llevaba en la cara, a lo que ella contestó: -Se que lo he
hecho todo lo mejor que podía hacerlo, y que ustedes se han dado cuenta. El
señor se quedó un poco sorprendido, y la dio las gracias, diciéndole que la llamarían.
-Al día siguiente, la llamaron para decirla, que la habían
aceptado.
-Esta chica, lo que hizo, fue imaginarse la situación y
pensar que todo va a salir bien, y así sucedió.
-Todos hemos leído en los periódicos que los jugadores de un
famosa equipo de fútbol, que llevaban una mala racha, hicieron una terapia de
este tipo, y se imaginaron metiendo goles, y así pasó.
-No debemos pensar que son tonterías, y, cuando dudemos, reflexionaremos sobre el
misterio de que los músicos imaginan las canciones, las oyen en su cabeza antes
de escribirlas en las partituras, y los arquitectos las casas, luego por qué
nosotros no nos podemos imaginar cosas buenas del tipo que sea, que deseamos en
el fondo de nuestro corazón.
-Creo que debemos hacer la prueba, porque por probar no pasa
nada, lo tomaremos como un juego, y luego a lo mejor, nos sorprenden los
resultados.