Esta tarde de Domingo de Ramos, estaba un poco triste y melancólica, no sé por qué me
acordaba de tantos Domingos de Ramos en Los Jesuitas de Maldonado con mis
padres, mis hermanos e incluso mi
abuelita.
-Hacíamos una gran procesión alrededor de la
iglesia que es una basílica enorme con palmas y ramos , y al volver a casa, mi
hermano Finín traía siempre una palma tan grande que chocaba con el techo, y
que mi abuelita ayudada por mi tía Loti, colgaba entre dos balcones en horizontal
en Maldonado.
-Esta tarde me he levantado decidida a hacer
unas rosquillas de anís, de las que solía hacer mamá, y como no estaba muy
segura de acordarme bien de los ingredientes, he visto un tutorial en youtube,
de la cocina de Anna, y me lo ha recordado inmediatamente, porque las hace muy
sencillas, muy sanas y explica todo muy clarito.
-He mezclado todos los ingredientes con una copita de anís, mamásiempre amasaba encima de una mesa enorme
que dentro tenía una antigua artesa, y a veces yo amasaba a su lado, al
terminar he hecho una bola y la he
tapado un poquito con un trapo para que repose.
-Cocinamos con los 5 sentidos y todos a la vez
nos transportan a la época de nuestros recuerdos.
Recuerdo perfectamente los sonidos de mi
infancia, la cocina daba a un patio de luces donde tendíamos la ropa, y yo
hablaba con mi vecina Mari, y nos mandábamos mensajes prendidos con una pinza
en la cuerda de colgar que era larguísima e iba de nuestra cocina a la suya que
estaba al otro lado del patio, y nos parecía algo verdaderamente emocionante.
-Yo aprendí a amar la cocina viendo cocinar a mi
madre y a mi abuelita, porque eran grandes cocineras. Mi tía Loti cocinaba muy
poco , pero lo hacía muy bien; hacía tortillas de patata exquisitas, croquetas
de jamón , tarta de chocolate…etc.
-Mi hija Gema, me ha ayudado a hacer las
rosquillas, y
la verdad es que las ha hecho en un momentito, aunque creo que son un poco
grandes, alguna parece un donuts, je,je.
-Las he frito en aceite de girasol, bajando un
poco el fuego, porque son gordísimas, y al sacarlas las he espolvoreado con
azúcar , y las he metido en una lata como hacía mi mamá.
-¡Están exquisitas!
- Buenas noches