Ayer me decía una amiga que
se ha dado cuenta de que se comporta de manera diferente cuando está con
la gente que cuando está sola, y la preocupa pensar que no sabe quién es ella
en realidad, pues piensa que casi siempre, está interpretando un papel.
-En la vida, todos interpretamos un papel, y nunca nos
comportamos igual, cuando
estamos en casa, como cuando estamos acompañados. La educación y la cortesía nos obligan a ser comedidos, porque si no, no nos podríamos relacionar adecuadamente.
estamos en casa, como cuando estamos acompañados. La educación y la cortesía nos obligan a ser comedidos, porque si no, no nos podríamos relacionar adecuadamente.
-Tampoco podemos ir contando nuestros estados de ánimo al
primero que se cruce con nosotros, pero yo creo que eso no es fingir, sino saberse comportar en sociedad.
-Nunca somos los
mismos en el trabajo, que en la intimidad de nuestro hogar, ni bromeamos de la
misma manera en casa de amigos que en un acto social.
-Erving Goffman decía : “Las personas somos como actores que
actúan para los demás, pero actúan de forma diferente cuando están en el escenario que cuando lo hacen entre bastidores”.
-Aprender a conocernos a nosotros mismos conlleva un trabajo
interior, y una profunda observación para saber realmente lo que nos gusta y lo
que nos desagrada.
-La forma que tenemos de mostrarnos a los demás, está
relacionada con nuestro nivel de autoestima. Todos queremos ser aceptados y que
nos quieran por eso intentamos mostrar ante los otros nuestra mejor cara.
-Cuidar la imagen que damos ante los demás, no es malo.
Podemos mostrar nuestros aspectos más atractivos, no solamente para obtener la
aprobación de los demás, sino también para mejorar nuestra autoestima.
-A veces lo que descubrimos de nosotros no nos gusta, y por
eso lo escondemos, pero es una actitud buena, porque estamos en camino de
corregirlo, ya que lo primero es reconocer que algo va mal, y lo disimulamos,
porque no nos parece bien, y lo segundo es poner manos a la obra para mejorarlo.
-Ser uno mismo, es no aceptar cosas que van en contra de nuestros principios, y saber decir que no,
ante cosas importantes que te desagradan, porque van en contra de tu
moral y de tu orden de valores.
Para tener éxito, debemos hacer todo lo posible para parecer
exitosos.
-Ser uno mismo, puede ser, querer
ser mejor que el que hasta ahora hemos sido;
ser “como queremos ser”, o “como nos gustaría
ser” aunque a veces seamos conscientes
de que no somos así realmente; pero eso tiene fácil arreglo.
- En nuestro Mundo, todo es
cambiante, nada permanece estático, entonces, nosotros no tenemos por qué ser
iguales al que éramos hasta ayer. Desde hoy podemos ser mejores.
Podemos empezar a comportarnos como lo haría la persona en la
que queremos convertirnos, y el cabo de un tiempo, lo seremos ya que ” la
práctica hace maestros”.
-Aristóteles decía: "Somos lo que hacemos repetidamente. La Excelencia, por lo tanto no es un acto, sino un hábito"
-Si queremos ser educados, nos comportaremos con educación.
-Si queremos ser cultos, nos
dedicaremos a leer y a formarnos, y actuaremos con prudencia para no parecer
incultos.
-Si queremos tener muchos amigos,
seremos amistosos con la gente.
-Si queremos ser buenos, actuaremos
con bondad, y así podemos añadir a nuestra lista un montón de cosas que desearíamos
tener.
-Si queremos ser tolerantes,
actuaremos con tolerancia.
-Debemos reflexionar, y darnos
cuenta de que para aspirar a la excelencia tenemos que mejorar nosotros en vez
de pretender que mejoren los demás