-La banda independiente más importante de Portugal “The Gift”, formada hace más de 17 años por : Nuno Goncalves, Sonia Tavares, John Goncalves, y Miguel Ribeiro, se ha presentado en el Teatro Circo Price de Madrid, con un maravilloso concierto, donde han podido demostrar que su talento supera con creces todas las expectativas.
-Toda la gente que ha tenido la suerte de poder asistir, dicen que gana mucho en directo, que la voz de su vocalista Sonia es aún más potente y tiene muchísimos más registros que en el fantástico libro CD con DVD presentado en forma de agenda llena de color.
-Tienen algo especial, que te engancha al ratito de escucharles, porque es una música tan alegre y positiva, que te hace sonreír, y que te invita a moverte a su ritmo.
-Las canciones de su nuevo disco “Explode” han alcanzado los puestos más altos de las listas de ventas en Portugal. Ha salido al mercado cinco años después de publicar “Fácil de entender”. -Sus letras son todas preciosas, y llevan un mensaje optimista y romántico. Seguramente dentro de poco será también número uno, con su rock alternativo aquí en España.
-Mientras estoy escribiendo mi blog, últimamente pongo su música, y aunque todas son bonitas, me encanta “Always Better if you wait for the sunrise”, porque me emociona, y la escucho muchas veces.
-Las letras de sus canciones, son verdaderos poemas con mensaje, muy al gusto español, porque a los españoles nos gusta que las letras, nos digan cosas, y, además todas muy positivas.
-Las voces, son maravillosas, y no tiene nada que envidiar a ninguna banda inglesa o americana, porque respetando su propio estilo, está a la altura de U2, Coldplay,etc.
-La voz de Nuno Goncalves cantando “The mother of my mother” me ha hecho llorar.
-Escuchando “Mermaid song”, en la dulce voz del grupo junto a Nathalie Portela, es emocionante pensar que se refiere a su preciosísimo bebé durante su embarazo. Eso la da más ternura.
-Mi hija Gema, que fué una de las afortunadas que presenció el concierto ayer en directo, dice que la gente estaba tan contenta y participó tantísimo cantando y alabando al grupo que tuvieron que regresar a seguir cantando porque el público no les dejaba irse y cantaron más de 6 canciones más.
Me contó, que al final, el grupo sorprendió bajando del escenario y sentándose entre su público en la pista central del circo, y cantando a capela con un pequeño piano que parecía de juguete. Fué como viajar en el tiempo al festival hippie de Woodstock.
-¡Muchas gracias por traer este soplo de aire fresco a España!.
