Hoy hemos
tenido un día de suerte.
-Si empiezo
a contaros como empezó todo , probablemente llegaréis sin esfuerzo a la
conclusión de que estoy un poco “ para allá”, que viene a significar “como una
cabra”, o “como las maracas de Machín”….
-Al
levantarnos esta mañana llovía a
cántaros, o más bien jarreaba.
Parecía que estábamos en París……
-Me asomé a
la terraza, y en un arranque de generosidad de madre protectora, le dije a mi
hija Gema que se llevara mi coche a la academia que seguramente llovería todo
el día y que así no se mojaba.
-Al llegar
al coche, Gema me llamó al móvil para decirme que ayer al mediodía, me había
dejado las luces encendidas, y que el coche no arrancaba porque debía haberse
quedado sin batería.
-Mi marido
me regaló una lista de piropos muy masculinos, del tipo de:
- ¡Claro, no
te fijas en nada!, ¡estarías hablando por teléfono!...etc, y como no encontró eco
ni ganas de pelea, me dijo que llamara a la Mutua, a decir que me mandaran un
mecánico con otra batería.
-Bajé al
coche con Gema, y estuvimos pensando que había sido una suerte que esto nos hubiera pasado en las puertas de
casa, porque hubiera sido terrible si te pilla aparcada en cualquier calle, lloviendo de esa manera y sin
tener adonde ir.
-Nos subimos
a casa calentitas a esperar al mecánico.
-Cuando
llegó el mecánico llovía y llovía, y Gema le estuvo tapando con su paraguas,
cosa que él agradeció diciéndola:
-¡Te voy a
recuperar la batería, y luego te vas a hacer kilómetros por carretera para que
se recargue!
-. Así que
la acompañé y nos fuimos por la carretera de Burgos hasta Ikea, y vuelta.
-Me dejó en
la peluquería y se marchó a su academia tan contenta, porque en estos momentos
y a fin de mes, cambiar la batería del coche, no era precisamente lo que habíamos planeado.
-Yo, he
estado pensando que hemos tenido tanta suerte, porque en ningún momento nos hemos
enfadado , sino que hemos puesto los medios para resolver la situación, sin
hablar de gastos, ni de que había sido por culpa de……
-Creo
sinceramente que como hemos aceptado la situación con optimismo, la suerte se
ha puesto de nuestro lado, ya que las personas con suerte son siempre
optimistas y nunca se dedican a buscar
culpables, pero que si los buscas siempre los encontrarás.
-Cada día
creo más que cada uno nos fabricamos muchas veces nuestra propia suerte porque
no siempre sabemos reaccionar colaborando con lo inevitable.
-He dado las
gracias, por este lluvioso día de suerte que hemos tenido.