Esta tarde
hemos llevado mi hija Gema y yo a mis nietos Natalia de 4 años y medio y a
Alvarito de 2 años y medio a Ikea con nosotras, porque Gema quería comprar unas
flores y un jarrón para que pinten sus alumnos y yo necesitaba unas velas, unos
vasos , y cuatro tontunas más.
-El plan era
tomar algo rápido con los niños en la cafetería, comprar las cuatro cosas y volver enseguida a casa.
-Entrar en
Ikea con niños, es como llevarles al castillo de irás y no volverás, porque
todo les gusta y les atrae, y además en Ikea, tienes la sensación de que han
pensado en ellos, y en su comodidad, porque desde que traspasan la puerta, parece que no molestan a nadie .
-Nada más
subir en el ascensor a la cafetería, pidieron emocionados tortitas con nata, que
olían muy bien.
- Las estaba
haciendo un chico amabilísimo que bromeó con ellos, preparándoselas con el
sirope y la nata a su gusto, porque les preguntó a cada uno que como las preferían
y en cuanto se las tomaron se metieron en unos recintos llenos de peluches y de
juegos, mientras nosotras merendábamos tan tranquilas porque estábamos
sentadas junto a ellos, en una barra circular que rodeaba el recinto donde
jugaban.
-Una hora
después, conseguimos sacarles a base de paciencia y empezamos a hacer el
recorrido pasando por la sección de niños.
-Todo era de
su tamaño, con unos colores preciosos, había un auténtico circo de peluches que
podían coger y acariciar sin que nadie les regañara.
-Las
habitaciones están tan bien escogidas que parecían decorados de Hansel y
Grettel, con unas fundas nórdicas muy alegres.
-Todos los
cuartos tenían mesitas y sillas de su tamaño que podían probar, y unos cuentos
preciosos en las librerías que enseguida quisieron que se los compráramos.
-Había librerías con cajones de plástico de colores
que Natalia me explicó que las teníanigual en su casa, porque hace unos días las habían comprado sus papás para guardar sus
juguetes; me explicó que la rosa era para ella, la azul para Alvarito, la verde
para las cosas pequeñas, y así me ha recitado de memoria una lista con mucho
desparpajo.
-Nos ha
costado Dios y ayuda salir de allí, y llegar a las velas, porque durante todo
el camino se iban parando a tocar y a mirar, sin que hubiera peligro aparente.
-Cuando por fin
hemos llegado a las flores, ya era casi la hora de cerrar, y después de pagar ,
no sin antes coger unas servilletas preciosas, rollos de papel de envolver y
pilas para las luces de la casa de Hello Kitty, hemos tenido que entrar en la
tienda sueca a comprarles las exquisitas galletas de manzana, de limón, las que
vienen con forma de casa y se decoran…..y las galletas especiales que se van montando y decorando como la casita de los cuentos.
-Natalia nos ha hecho prometer que la haremos mañana con ellaun montón de cosas más.
-Hemos
llegado a casa tardísimo, pero nada más entrar, le han dicho a su abuelito que
se lo habían pasado muy bién y que mañana querían volver.
-Los
decoradores de Ikea, no me cabe duda de que saben lo que hacen, porque creo que
es la única tienda grande que ha pensado tanto en que los niños disfruten
durante su estancia allí, y que las familias se sientan cómodas.
-¡Enhorabuena
al personal de Ikea!