"SI NO TIENES LO QUE TE GUSTA, HAZ QUE TE GUSTE LO QUE TIENES"
De tí depende que tu vida sea feliz,debes escoger tus ingredientes.


lunes, 7 de marzo de 2011

"El Árbol, Que No Sabía Quién Era"




Os voy a contar un viejo cuento, que creo que nos lo podemos aplicar todos en algún momento, cuando nos dedicamos a ver las virtudes de los demás, y solo vemos nuestros defectos.
-Había una vez en un hermoso jardín, una gran cantidad de árboles, flores y plantas con un precioso colorido. Estaban muy contentos, porque les gustaban sus frutos, sus flores, y el exquisito olor que allí se respiraba. Todo era alegría en el jardín, excepto por un árbol que estaba siempre profundamente triste.
-El árbol, tenía un problema. Todos los árboles y arbustos, que habían sido plantados allí´, sabían quién era cada uno, y para lo que servía.”Manzano, “Naranjo”,” Peral”, “Hortensio”, “Rosal”….
-Pero ese árbol, nunca les decía quién era, ni para lo que servía. Los demás árboles, le veían tan triste, y sin ilusión que querían animarle.
-El manzano, creía que le faltaba concentración, y que si se concentrara, podría tener hermosas manzanas como él.
-El rosal, replicaba, que no, que era mucho más fácil tener rosas. Y el naranjo, naranjas.
-Así que el árbol, seguía creciendo mucho, pero cada día estaba más triste y más acomplejado.
-Un día, llegó al jardín un búho, la más sabia de las aves, y al ver la tristeza del árbol, exclamó:
-¡No te preocupes!, tu problema no es nada grave, porque es el mismo problema que padecen muchísimos seres sobre la Tierra. Yo te daré la solución:
-“No dediques tu vida a ser como los demás quieren que seas… ¡Se Tú mismo!, y escucha a tu voz interior! Y después, desapareció.
-El árbol, se puso a reflexionar, y pudo escuchar a su voz interior:
-¡Tú, jamás darás manzanas!, porque no eres un manzano. ¡Nunca, darás rosas!, porque no eres un rosal.
-Eres un roble y tu único destino, es crecer grande y majestuoso. Dar cobijo a las aves, sombra a los viajeros, y belleza al paisaje.
-Tienes una misión, así que ¡Cúmplela! El árbol, se sintió fuerte y seguro de sí mismo, y decidió ser aquello para lo que había sido creado y para lo que servía. Así que llenó su espacio, y se mantuvo erguido y orgulloso, y fue admirado y respetado por todos.
-Todos debemos querernos como somos, porque somos importantes y valemos para muchas cosas.
-Puesto que somos inteligentes, actuaremos con inteligencia, y no querremos nunca ser la fotocopia de nadie, porque siempre vale mucho más el original.
-Puesto que somos valientes, actuaremos con valentía, sin pararnos en pequeños obstáculos que podemos vencer en cuanto nos lo propongamos.
Y nunca más envidiaremos a nadie, por lo que tiene o por lo que es, ellos alcanzaron su meta, y nosotros, seguro que alcanzamos las nuestras.