Una de las cosas que más nos molesta , es que
nos encontremos con alguien conocido y no recuerde nuestro nombre.
-A todos nos ha pasado alguna vez , y sabemos
que se pasa un mal rato, porque piensas que esa persona no te recuerda, porque no le importas.
-Al oír nuestro nombre, se activa una región del
hemisferio izquierdo del cerebro que se
asocia con el placer y la atención, por eso cuando alguien conocido lo
olvida, nos produce un gran disgusto y lo interpretamos como un desprecio.
-Al presentarnos a los demás, y darles nuestro
nombre, dejamos de ser desconocidos para ellos, lo mismo que ocurre cuando
ellos nos dan el suyo; así que hay que intentar por todos los medios, no
olvidar los nombres para evitar malos entendidos.
-Según los expertos es muy fácil olvidar el
nombre de una persona, porque los nombres en sí, carecen de significado, ya que
no son motes que ponen los amigos y que se refieran a aspectos de nuestra
personalidad, como” Dora la exploradora”.
-Es muy curioso, que al oír nuestro nombre, se agudizan los sentidos, las
pupilas se dilatan, y tendemos a prestar muchísima atención a la persona que lo
pronuncia, quizás porque nos sentimos valorados y reconocidos.
-Para no olvidar el nombre de una persona, según
un estudio publicado en la revista de
divulgación “Journal of Neurosciencie” deberemos asociar su cara a su nombre,
para que así se produzca una interacción entre varias regiones cerebrales:
-La corteza perirrinal que es la que nos ayuda a
identificar un objeto y nos dice si lo hemos visto antes o no.
-La corteza prefrontal media que es la que está
asociada a funciones cerebrales mayores.
- Y el hipocampo que tiene un importante papel
en la memoria espacial y la orientación.
-Según la Dra. Warbuton, es aconsejable “usar
estrategias para poder procesar mejor la información”, como puedan ser:
-Repetir en voz alta el nombre de la persona que
nos acaban de presentar, y fijarnos en su cara, su pelo, sus ojos, y cualquier
otro detalle significativo, para así grabar
su imagen en nuestro cerebro.
-Así que intentaremos retener el nombre de las
personas en el mismo momento en el que nos las presenten para evitar que se
disgusten y que nosotros pasemos un mal rato.
-Buenas noches
