Lo que nosotros creemos es importantísimo;
nuestras creencias consolidarán nuestros
pensamientos, y estos crearán nuestra vida.
-Tenemos que dedicarnos un tiempo a nosotros, si
estamos muy ocupados, lo organizaremos en nuestra agenda como si fuera una
cita con un cliente importante, porque
nadie es más importante para nosotros, que nosotros mismos.
-Una vez que estemos sentados en un lugar
tranquilo, pasaremos revista a nuestras creencias; decidiremos cuales son las buenas , las que nos ayudan a potenciar nuestras cualidades , nuestros dones, y
gracias a ellas crecemos .
-Cuando descubramos cuales son las limitantes, que nos cortan la creatividad, y nos impiden
perseguir nuestros sueños, las rechazaremos y nunca más las tomaremos en cuenta.
-Las creencias las hemos ido adquiriendo a lo
largo de los años, por imitación, por costumbres familiares y por experiencias
buenas y malas que vivimos y que nos han marcado.
-El problema es que muchas no son reales, sino
que son interpretaciones erróneas de sucesos antiguos, por eso es necesario que
las revisemos, ya que la vida es cambiante y sorprendente y nosotros también hemos
cambiado por lo que las cosas que nos parecían bien hace tiempo , a lo mejor hoy ya no nos sirven ni nos gustan.
-Cuando estemos seguros de lo que nos gusta y lo
que queremos , nos prepararemos una serie de frases motivadoras para impregnar
con ellas a nuestro subconsciente.
-Repetiremos que somos personas válidas,
valientes y capaces de conseguir lo que deseamos tener, y en cuanto lo
repitamos durante al menos 21 días, habremos conseguido que se convierta en un
hábito perfectamente interiorizado.
-Buenas noches.