Con tantísimo tiempo de encierro, llevo mucho
tiempo sin ver a mis nietos y aunque hablo con ellos por teléfono, echo mucho de
menos sus carreras persiguiéndose por las habitaciones y esas risas que llenan
toda la casa.
-Desde el momento en el que nace un nieto, nace
una abuela.
-Siempre había oído que los nietos son esto y
son lo otro, pero hasta que no los he tenido no me he dado cuenta de cuánto les
quieres .
-No creo que se les quiera ni más ni menos que a
nuestros hijos, son cariños distintos ;porque como decía mi suegra tan amiga
del refranero: “con un cariño hay para
mucha gente”.
-Con nuestros nietos renovamos la vida;
empezamos otra vez de cero con los biberones, los pañales, las papillas ,los
cumpleaños, los deberes…..y enseguida vemos
que ya tienen 12 años y nos empiezan a
dejar con la boca abierta al comprobar que saben mucho más de informática que
nosotros y que les tenemos que pedir ayuda con el móvil y con el ordenador.
-Las abuelas y los nietos nos llevamos muy bien
, porque nosotras nunca tenemos prisa como sus padres y les dedicamos todo el
tiempo que necesiten .
-Los niños hablan mucho con sus abuelas y nos preguntan
cualquier cosa, sabiendo que no nos vamos a reír de ellos diciéndoles que no pregunte
tonterías y que les prestaremos mucha
atención.
-Tenemos paciencia y les convencemos para
mejorar su cuaderno de clase. Borrando lo que está sucio y coloreando lo
inacabado.
-Les tranquiliza mucho preparar un examen con
nosotras porque les preguntaremos las veces que hagan falta hasta asegurarnos
de que se lo saben , y les decimos que van a sacar un 10.
-Estudiar con ellos también es muy interesante y
nos permite refrescar cosas olvidadas.
-Nos encanta cocinar para ellos. Cuando nos sentamos toda la familia en la
mesa, ellos nos alegran la comida ,
porque de todo hacen bromas.
-Les encanta escuchar historias de nuestra época
de niños y compararla con la de ellos y también les gusta mucho que les
hablemos de su árbol genealógico y les enseñemos fotos de nuestros antepasados
.
-Les contamos cuentos chinos y cuentos antiguos
que escuchan encantados antes de dormirse
y también jugamos al veo veo.
-Las abuelas somos la memoria de la familia , y
cuando sus padres se enfadan porque tiran el helado y les regañan , les interrumpimos diciendo a su
padre, que no riña tanto, que él de pequeño hacía lo mismo y se manchaba más, jajajaja.
-Buenas noches.