Me he reído muchísimo al leer la noticia de que los cuervos se pelean, y después hacen las paces, y están más amigables que antes de la pelea.
-Unos científicos pacientes y curiosos llamados Olaith Frasery Thomas Bugnyar del Centro de Investigación Konrad Lorenz, en Austria, han estudiado durante 2 años la vida social de varios cuervos alojados y criados en cautividad por el centro, para reflejar que la empatía no se produce solamente en los mamíferos.
-Han analizado sus rutinas y sus relaciones, sobre todo durante las riñas (Han contabilizado 152 peleas) y ha llegado a la conclusión de que después de la pelea, los cuervos consuelan al perdedor, cuando es su amigo.
-Los cuervos son sensibles a las necesidades emocionales de los otros, y son perfectamente capaces de sentir empatía. Además, después de hacer las paces, ya no tenían solamente un comportamiento amigable, puesto que se besaban, juntando los picos y pavoneándose uno delante del otro, y eso no es precisamente de amigos.
-He puesto la foto de dos niñas peleándose por una muñeca, porque cuando yo daba clase a los párvulos de 4 años, a veces, parecía que muchas niñas, después de una buena pelea con otra niña, pasaban a ser "amigas del alma"
-Creo que tenemos un gran desconocimiento de los animales en general, y siempre que estos etólogos se ponen a investigar, nos sorprenden con sus resultados. No debemos olvidar que somos hijos de la evolución y por lo tanto tenemos mucho más en común de lo que nos creemos, porque antes de ser humanos, hemos sido peces, anfibios, reptiles, y aves. No podemos olvidar que cuando tenemos frío, o una gran emoción, se nos pone carne de gallina, porque, no estamos tan lejos de ellos, ni tan desconectados.
