Una amiga
mía, profesora de Literatura de un
instituto, ha recibido esta mañana un correo de alguien insultándola, supone, que
será de algún alumno y se ha llevado un disgusto tan terrible que solo tenía ganas de llorar y
llorar, porque dice que ha sido algo tan injusto e inesperado, que la ha
dejado hundida.
-Cuando me
lo ha contado, me he acordado del cuento del profesor al que un alumno le dice
que es el peor profesor que ha tenido nunca, a lo que el profesor contesta que
él no recibe sus palabras, porque cuando alguien intenta ofenderle, o decirle algo
desagradable, que no está dispuesto a
aceptar, simplemente no lo acepta y lo da por no recibido.
-Si
recibimos los insultos y el veneno de
alguien con ira, o nos enfadamos o nos disgustamos por ello, resulta que lo
estamos aceptando como si fuera un regalo, así que si no nos gusta, no nos
sirve o no nos vale, lo mejor es no aceptarlo directamente.
-En el caso
de mi amiga, yo la he aconsejado que lo devuelva, o lo reenvíe, y que marque al
remitente como correo no deseado.
-Tenemos
libre albedrío, y debemos acostumbrarnos a escoger nuestro estado de ánimo, así
que vamos a echar fuera todo lo malo injusto y corrompido que intenten mandarnos
porque solo nos va a servir para disgustarnos
y ponernos enfermos.
-De nosotros
depende el ser felices o desgraciados, y creo que debemos escoger ser felices.
-Desgraciadamente
no podemos mandar en las demás personas, pero en nuestra cabeza si, en nuestra
cabeza mandamos solamente nosotros y
tendremos exactamente lo que decidamos tener.
-Así que a
mi amiga la he dicho lo que pienso:
-Eres una
gran profesora, que está muy entregada a
sus alumnos y que siempre tiene un rato para atenderles, y no tienes la culpa si un alumno vago y rencoroso decide
cargar su ira contra ti, así que lo mejor que puedes hacer es pasar página y
hacer una lista de los alumnos que sabes
a ciencia cierta que están muy contentos con tu clase, y que han aprendido mucho, y como la lista
será muchísimo más larga, da las gracias por tener tantos alumnos contentos
con su profesora y que gracias a ti
disfrutan de la buena literatura, y han aprendido a leer, a escribir, y a disfrutar de buenas obras literarias y de buenas novelas.
-Proverbios 15:1
-“La
respuesta amable calma el enojo, pero la agresiva echa leña al fuego”.
- Nunca más
aceptaremos la ofensa de otro, ni responderemos ofendiendo más.
-Como dice
el cuento. Mantendremos el control de nuestras emociones, y no guardaremos
amargura en nuestro corazón, ya que sabemos que de estas cosas solo obtendremos
disgustos.
-“Disfrutaremos
aquí y ahora mismo, porque es mucho más tarde de lo que creemos”