-Los whatsApp son mensajes gratuitos que nos
mandamos con los móviles, y a mí, últimamente solo me mandan cosas que me hacen
reír, así que gracias a estos mensajes, nos pasamos el día riéndonos de una
serie de tontunas que nos reenviamos unos a otros.
-Hay uno muy gracioso que anuncia un gimnasio, y
que dice:
-¿Cansado de ser gordo y feo? ¡Sea solo feo!, y
pone el teléfono para que te apuntes al gimnasio.
-También sirven para que si de pronto te acuerdas de alguien, teclees
rápidamente cuatro palabras de cariño, y te puede pasar lo que me pasó a mí el
otro día, que vi una cosa muy bonita y me acordé de una amiga, y la mandé
rápidamente uno, contándoselo, y ya de paso la puse que me acordaba mucho de
ella y que teníamos que hacer un huequito y quedar a tomarnos un cafetito.
-Al día siguiente, me llamó emocionada, porque
cuando lo recibió, estaba en la cama, un poco “pachucha” y muy baja de
ánimo; pero me dijo que al leer mi mensaje, se dio cuenta de que tiene amigas que la queremos, y que nos gustaría
ayudarla si nos lo pide, porque a veces todos olvidamos que tenemos que pedir
si queremos que nos den, ya que la gente no adivina nuestros pensamientos, y no
sabe si ya estamos repuestas o si hemos recaido….o si nos apetece que nos
visiten o preferimos que nos dejen solas un tiempo…Pero, ¡ hay que decirlo!
-Me gusta mucho la frase de no sé quién, que
dice: “Voy a pasar por la vida una sola vez, así que cualquier cosa buena que
pueda hacer, la haré ahora mismo, porque luego no volveré a tener ocasión.
-Cada vez que suena la alarma de que me ha
llegado un nuevo whatsApp, lo leo, y si merece se lo reenvío a un montón de
gente para que se ría también, y a lo mejor, a alguien le levanta el ánimo, y
le ayuda a no sentirse solo.
- Las mujeres, nos mandamos muchos bromeando con
el peso, como el que me han mandado hoy, en el que se ve a una señora un poco
rellenita pesándose con cara de sorpresa, mientras exclama: ¡¡
- ¡¡Oh Dios Mío!! Peso lo mismo que una persona
de 2 metros.
-¡Tengo Que Crecer Urgentemente!.....
-No tenemos más remedio que cada uno seguir con
su vida de la mejor manera posible, porque lo que es seguro es que por mucho
que nos amarguemos, y por mucho que repitamos la película de que estamos en
crisis, no solo no vamos a mejorar nada las cosas, si no que probablemente las
empeoraremos muchísimo porque con una mala actitud, atraeremos lo malo en vez
de lo bueno…
-Ahora mismo me acaba de llegar uno,
preguntándome que tal me va todo,
es de Cristina, una jovencita a la que
quiero mucho, que ha sido alumna mía durante muchos años, y con la que sigo en
contacto por whatsApp, ya que intercambiamos noticias, y “tontunas” que nos
hacen reír, y así siempre estamos al
día.
-Son las 9:40, y Cristina todavía está trabajando; es abogado y trabaja en un despacho, donde cuando hay mucho trabajo no tienen horario de salida, así que creo que un pequeño mensaje de ánimo, la alegrará un poco, y la hará sonreír.
-Mis hijos y yo tenemos uno abierto con el
nombre de “familia”, y allí escribimos cada día las novedades: mi hijo Félix
pone fotos de los niños, Daniel nos cuenta sus cosas desde París, Gema nos pone cuadros donde se ven los
progresos de sus alumnas, y yo suelo
reenviarles cosas graciosas, mi marido no está en el grupo, porque su
teléfono es de Atapuerca; tiene el mismo móvil desde hace mil años, y no quiere otro porque
nunca habla por teléfono, y si le llamas , te contesta con monosílabas y
cuelga; así que yo se lo enseño y le dejo ver las fotos y los mensajes en el mío…..
