Abby Putterill,una adolescente de 16 años, ha
adoptado una ardillita mopane abandonada y lesionada, y la ha permitido anidar
en su pelo.
-Los padres de la adolescente tienen un
santuario de vida silvestre en Harare(Zimbabwe),
desde principios del año 1980, donde trabajan con amor e ilusión en salvar y
proteger a la fauna africana enferma y
herida y un frío día , encontraron tendida en el suelo de cemento de la oficina, a un bebé ardilla, lesionado que
se debía de haber caído de su nido, parándose en el techo de paja, que se
rompió, haciéndola caer en el suelo bruscamente .
- La niña cogió a la ardillita y se puso a
acariciarla, y a guardarla en la palma
de su mano, llevándola a su casa; la ardillita en cuanto se tranquilizó y se
sintió segura, trepó a la
cabeza de la niña , y se escondió en la cola de caballo que esta se había sujetado con
un pasador, como si fuera su nido , y se escondió entre el pelo, asomando solo
su pequeño hociquito, quedándose enseguida completamente dormida.
-Los padres de la niña, grandes amantes de los
animales, la aconsejaron que la dejara anidar en su pelo hasta que se
tranquilizara, y la verdad es que es tan pequeñita y la molesta tan poco, que
Abby, no tiene ningún inconveniente en dejarla estar en su pelo, ya que así se
siente segura y protegida.
-Abby está contenta y feliz , porque la ardilla está tomando biberones de leche maternizada
y cereales, y está recuperándose rápidamente, y aumentando su fuerza y su
vitalidad día a día. Es tan graciosa, limpia y cariñosa, que ha pasado a formar
parte de esta peculiar familia.
Deseamos que la ardillita llegue a estar tan grande como la de esta foto, y volver a vivir en libertad con sus amiguitos en los preciosos bosques de Zimbabwe