Muchas veces
nos hacen un cumplido , y somos incapaces de aceptar los elogios dirigidos a
nosotros o a nuestro comportamiento o actitud.
-Nuestra
educación ha influido muchísimo en nuestra manera de pensar y actuar , y nos vamos
dando cuenta a lo largo de nuestra
vida de que hay muchísimas cosas que no
nos gustan , que no nos sirven y que tenemos que “desaprender”, (como decía mi
admirado Punset), y ahora lo estamos haciendo.
-Nos hemos
acostumbrado desde pequeños a contestar al muchas gracias con un seco de nada , sea lo que sea que
hayamos hecho bien .
Saber aceptar
elogios es muy importante porque significa que damos valor a nuestros actos, a
nuestros comportamientos y nos gusta que
los demás también lo hagan si piensan que nos los merecemos.
-Cuando
decimos que no ha sido nada, que no tiene importancia , estamos
descalificándolos y mandando al Universo nuestro desacuerdo con esta gratitud ,
así que no nos mandará más.
-Después de
hacer un favor a alguien, con algo que
nos ha costado mucho tiempo, cansancio, dinero…etc, cuando nos lo agradecen, si
nos limitamos a decir un ” de nada!”, o “no
tiene importancia”, es un comportamiento
erróneo, porque si la tiene, por
supuesto que la tiene.
-Podemos dar
las gracias
-Sonreír asintiendo.
-Decir . me
alegra que te guste…
- Pero cuando
se trate de favores importantes a personas cercanas; familiares, buenos amigos,
compañeros de trabajo con los que tenemos mucha confianza, vecinos…etc , contestaremos
con la verdad, y les diremos: lo he hecho encantada porque sabía que te
hacía falta, o que te gustaba, o lo necesitabas, o incluso le
diremos que es una persona muy querida ,
y siempre que nos necesite , la ayudaremos en lo que podamos..
-Tendemos a
decir: es que yo soy así, y esto nos verdad, porque no nacemos con un carácter
como la tortuga nace con una concha, porque nuestra personalidad puede
modificarse positivamente, puede
cambiarse, no estamos predestinados a ser felices o infelices.
-Somos
personas inteligentes que podemos cambiar si lo deseamos, no se trata de que
seamos otra persona, sino nosotros mismos distintos a como éramos y como
queremos ser.
-Nosotros
somos lo que pensamos , por eso podemos cambiar una serie de ideas erróneas en
las que un día creímos y habíamos
establecido en nuestra cabeza.
-Si nos
vemos y nos consideramos personas de éxito, con una gran mente, poder e inteligencia, lo
seremos.
-Así que
como dijo literalmente nuestro insigne Premio Nobel de la Medicina Don Santiago
Ramón y Cajal en el año 1926: “Todo ser humano, si se lo propone, puede ser el
escultor de su propio cerebro” .
-Buenas
noches,