Estoy leyendo en una revista femenina de belleza y moda consejos para el cuidado de la piel, y he llegado a la conclusión de que toda persona mayor de 40 años, es considerada una vieja.
-¡Que lista era mi madre que nos decía cuando teníamos 15, o 20 años!:-¡Niñas, jamás hay que presumir joven, ni de sana!.....
-Cuantas veces me he acordado de ella, y me acuerdo cuando entrevistan a actrices sin sustancia que cada dos palabras sacan la coletilla de: !Es que soy muy joven, o es que soy demasiado joven!. Me dan ganas de hablarles en voz alta y decirles:-¡No te preocupes , mona, que eso se cura con el tiempo!.
-Creo que deberían presumir de su trayectoria personal, de sus logros, de lo que han aprendido, de las cosas que han hecho por los demás, porque son las que verdaderamente han hecho que cada uno, seamos como somos….
-No somos jóvenes, pero tampoco somos viejas. No debemos hacer caso a esa corriente de superficilialidad, que está consiguiendo que mujeres valiosas y hermosas, se conviertan en máscaras de sí mismas a fuerza de querer parecer mucho más jóvenes.
-Me parecen perfectos los tratamientos de belleza que consiguen dar frescura y lozanía al cutis, pero todos vemos a diario a personas que a fuerza de estirarse la frente les llega a las orejas y se les pone cara de hormigas.
-Lo más doloroso de todo esto, es que estas campañas de exaltación de la juventud, degradan a los que ellos consideran mayores; no les conceden el mérito de la vida vivida, la cultura adquirida, los conocimientos atesorados, y son tan ignorantes que no cuentan con ellos y toman muchas veces decisiones erróneas, porque solo están llenos de teorías, y en cambio hay muchos mayores, que coleccionan experiencias, porque han vivido una vida intensa, y sabrían perfectamente solucionarles muchos de sus problemas, pero si no se la piden…..
- Valoran la habilidad con la informática, y no se dan cuenta que no es su mérito, sino que son de una generación que crecieron con las maquinitas y que han ido aprendiendo esas cosas por osmosis, ya que se han desarrollado a su ritmo.
-Ayer por la tarde tuve en casa a mis nietos: Alvaro que cumplirá pronto 2 años, y a Natalia que tiene 3 y medio. Es impresionante ver cómo manejan mi Iphone, desde luego mejor que yo, porque su padre se lo deja, y abren aplicaciones, amplían fotos……etc.
-Nuestros niños, tienen ordenadores en el parvulario, y saben utilizar programas adecuados a su edad, que tienen metas claras adecuadas a sus habilidades, por eso, estos niños a los que se les ha enseñado la informática a una edad temprana, crecen con la naturalidad de manejar esa tecnología, y la usarán con toda facilidad a lo largo de su vida.
-A pesar de su habilidad, yo no he pensado en ningún momento que ellos sean listos y yo tonta, sino que hay cosas para las que tienen una gran habilidad, y esa es una de ellas, pero si les concedemos un título superior por saber esas cosas, sería como la famosa poesía de Nicolás Fernández de Moratín, que casi todos conoceréisTitulada :
-¡Admiróse un portugués!
-¡Admiróse un portugués
De ver que en su tierna infancia
todos los niños de Francia
supiesen hablar francés!.
“Arte diabólica es”,
Dijo torciendo el mostacho,
“que para hablar en gabacho
un Fidalgo en Portugal
llega a viejo, y lo habla mal;
y aquí lo parla un muchacho”
-Así que no haremos caso de estas tonterías, y disfrutaremos pensando en la gran cantidad de cosas que hemos hecho y que sabemos hacer, presumiremos de tener un buen criterio, que hemos adquirido con las experiencias vividas, tenemos una gran lista de cosas que para nosotros son innegociables, y también de las que son imprescindibles.
-Sabemos bastante bien lo que queremos y lo que no queremos.
-Hemos aprendido a valorar y a saborear la vida, y valoramos mucho lo importante.
-Sabemos que un buen palique con amigos apropiados, es un tesoro.
-Hemos descubierto que tenemos dos manos, una para ayudarnos a nosotros mismos, y la otra para ayudar a los demás.
-Yo creo, que los años, como me dijo una vez el escultor Santiago de Santiago, le da a cada uno la cara que se merece, por eso hay personas dulces, atractivas, y encantadoras a pesar de tener muchos años, y personas con caras de brujas y expresiones agrias, por mucho que se retoquen…..
-Porque a las buenas personas, los años les conceden un mayor atractivo.