Todos olvidamos nombre y contraseñas
He
leído un artículo interesantísimo
sobre cómo actúa nuestro cerebro, donde
un estudio de Joseph T. Hallinan, autor de “Las
trampas de la mente”, justifica muy bien los motivos por los que todos
olvidamos tantísimas cosas.
-Yo, personalmente, he cambiado mi contraseña, y luego
no recordaba la nueva, así que he tenido que pedir ayuda.
-La mayoría de las veces, vamos
con el piloto automático puesto, y hacemos las cosas sin prestar atención, por
eso, luego no podemos acordarnos.
Lo mejor es practicar la ley del
desapego que consiste en pasar página, ocuparnos de otra cosa, y enseguida recuperaremos
el recuerdo perdido.
-El problema es que cuando olvidamos un
recuerdo, un dato, o lo que sea que nos hace falta, nos angustiamos tanto que
eso nos incapacita para recuperar ese dato, es como si nos bloqueáramos.
-Para recordar tenemos que hacerlo de modo
consciente, incluso nos recomiendan que lo digamos en voz alta, “Dejo mi bolso
en este cajón”.
-Tenemos estos despistes porque estamos cansados y estresados. Vivimos en una sociedad acelerada, y todo tenemos que hacerlo deprisa, como si nos estuvieran persiguiendo, o como si fuéramos a perder la oportunidad de conseguir algo.
-Hay
personas muchísimo más propensas que otras a tener despistes, es algo genético,
aunque no cabe duda que también influye la edad, porque una persona joven suele
estar mucho más alerta que una persona
mayor, aunque haya excepciones.
-
Podemos afirmar que nuestra memoria funciona razonablemente bien, si salimos de
casa con la ropa bien puesta; sabemos recorrer el camino que nos lleva al
trabajo, podemos hablar por teléfono con las personas conocidas, etc.
-A
mis hermanas y a mí, nos preocupa mucho este tema (aunque gracias a Dios, de
momento las tres estamos muy bien),
porque mi bisabuelo, mi abuela y mi tía han padecido demencia senil, que es
algo parecido al mal de Alzheimer, pero que no se puede detectar con pruebas ni
prevenir, ya que van perdiendo facultades poco a poco; es un deterioro
cognitivo gradual.
-La
mayoría de nosotros, cuando nos olvidamos de los nombres de las personas, nos
sentimos muy culpables, y este estudio, nos tranquiliza al
explicarnos el motivo por el que nos sucede
esto.
-Los
nombres de las personas nunca quieren decir nada. Carmen no tiene cara de
Carmen, ni Pilar ni Julio, a no ser que lo asociemos a alguien conocido; algo
así como “Carmen se parece a la tía
Carmen de mi amiga Marta Iglesias”.
-Si
queremos acordarnos, o necesitamos hacerlo, lo mejor será que hagamos
asociaciones con el nuevo asociándolo alguien que conocemos muy bien, ejemplo: Manuel,
se parece mucho a Ismael el entrenador personal, y también es práctico
repetir mentalmente el nombre varias veces cuando nos lo digan y volverlo
a hacer otra vez un poco después.
-Hallinan
hizo unas pruebas sobre la memoria con un grupo de hombres y mujeres, a las que
les dieron a leer una serie de biografías de distintas personas,
para luego preguntarles y ver qué datos eran los que mejor recordaban:
-Los
resultados fueron:
-El
69 % de los encuestados, recordaron los empleos de esas personas.
El
68 %, recordaban sus hobbies.
-El
62 % la ciudad en la que vivían, pero solo el
31%
fue capaz de recordar sus nombres.
-En
esta pruebe se ve claramente como baja el porcentaje al
recordar nombres, porque la memoria a corto plazo falla si no nos concentramos
lo suficiente como para retener información, y normalmente al escuchar un
nombre, no prestamos demasiada atención.
-De
acuerdo al estudio recordamos con más facilidad los trabajos de las personas y
donde viven, así que cuando nos presenten a alguien podemos preguntarle a que
se dedica, en que zona vive, para asegurar que nos acordaremos de su nombre.
-The
Wall Street Journal publica un estudio en el que afirma que los despistes
casi siempre aparecen en situaciones de nervios, de estrés,
de multitarea y de fatiga, y la buena noticia es, que el simple hecho de dormir
bien, y de hacer ejercicio, bastará para que mantengamos
nuestra memoria en forma y podamos recordar las cosas mucho mejor.
Espero
que os haya gustado. Mañana más….
-Buenas
noches
Paloma