“Cada día trae su afán”, es un dicho antiguo,
que probablemente tenga como base una frase del evangelio según San Mateo (6:25-34):”Por
tanto, no os preocupéis por el día de mañana; porque el día de mañana se
cuidará de sí mismo. Bástele a cada día sus propios problemas”.
-Todos tenemos problemas, (afanes), cosas que
nos preocupan , nos asustan y no sabemos resolver, porque saltar en el tiempo
como un funambulista lo hace en un alambre, es absurdo, ya que las cosas
raramente suceden como las pronosticamos.
-Tenemos que darnos cuenta de que solo nosotros
somos los conductores de nuestra vida, y que esos problemas, nos afectarán en la medida
que nosotros consintamos que nos afecten.
-Los hijos, las parejas, los amigos,
constantemente nos bombardean con problemas personales o ajenos, que
nos afectan enormemente, y a veces, no nos sentimos capaces de resolverlos , porque no sabemos
cómo.
-Tenemos que controlar nuestros pensamientos, y
evitar perder el rumbo.
-Tenemos que aceptar lo que no puede cambiarse; cuidaremos
de los demás en la medida que podamos, sin necesidad de cargar su vida en
nuestros hombros.
-La vida es cambiante , y tendremos que ir tomando decisiones
sobre la marcha, como decía Machado: “caminante no hay camino, se hace camino
al andar”.
-Los problemas ajenos, nos preocupan a veces
mucho más que los propios, sobre todo si son problemas familiares de personas
que confían en nuestra opinión, pero nunca deberemos olvidar que la última
palabra la tiene que decir el propio interesado, porque es su vida, y él o ella
tendrán que decidir qué rumbo escogen.
-Ante los problemas tendremos que escoger un
camino, una decisión, una solución, y lo que pasa es que sabemos que cada vez
que escogemos tenemos un 50% de probabilidades de acertar, y otro 50% de probabilidades
de confundirnos, así que cruzaremos los dedos cuando lo decidamos .
-Confiar en nuestra voz interior, suele ser
práctico, porque está demostrado y todos lo hemos comprobado muchas veces que
cuando hacemos algo que no nos convence, oímos una vocecita interior que nos
aconseja que no lo hagamos .
-Intentaremos conducir nuestra vida por caminos
que nos conduzcan a encontrar la felicidad.
-Buenas noches