negociadoras y razonamos con claridad, tendemos a expresar nuestros sentimientos de manera tradicional y efusivamente, así que nos echamos a llorar en el momento más inesperado.
-Nos gusta salir a comprar ropa acompañadas de
amigas, porque necesitamos su opinión sincera para afianzar nuestra autoestima.
-Sonreímos cuando querríamos gritar, cantamos
cuando sentimos ganas de llorar. Lloramos cuando somos felices y nos reímos
cuando estamos nerviosas.
-Vamos al médico con nuestras amigas para que no
tengan miedo y se sientan apoyadas.
-Nos privamos de lo que haga falta para que
nuestra familia tenga de todo.
-Amamos incondicionalmente.
-Nunca aceptamos un “no” por respuesta si
creemos que hay una salida.
-Celebramos los triunfos de nuestros hijos
llorando. Nos alegramos de corazón cuando nuestros amigos consiguen premios.
-Nos encanta recibir buenas noticias de
nacimientos o bodas.
-Pero nuestro corazón se rompe ante la muerte de
una amiga., en cambio somos fuertes al perder a seres queridos, si vemos que ya no tenían
más fuerza para seguir.
-Conocemos como nadie el valor de un beso y de
un abrazo, porque con ellos curamos un corazón roto.
-Pero tenemos un defecto grave. Necesitamos
saber que nos quieren , no nos basta con suponerlo; necesitamos oírlo frente a
frente , porque para nosotras que leemos los gestos , vale mucho más” una
imagen que mil palabras”.
-Buenas noches