Es curioso, que como entramos en la semana de Navidad, sin
querer me he puesto a pensar y a comparar, lo que hice el año pasado por estas fiestas, y resulta
que de pronto me he dado cuenta de que no soy la misma que era el año pasado.
Creo que soy diferente.
- Básicamente hay un montón de cosas que me importaban mucho
el año pasado y que este año no me importan nada de nada.
-La vida,( siempre lo digo, porque me parece una cosa muy
sabia, aunque no tengo ni idea de quién me lo dijo, o donde lo leí ), es como
una escuela. Hay personas que a pesar de
tener muchos años, parece que aún está en párvulos, pues no acaban de aprender,
mientras que otros en cambio están en la Universidad.
- Vemos todos los
días que nuestras prioridades no son las mismas, los que hemos cumplido los 50,
como dice una amiga mía china, empezamos a ser un poco sabios, y hay cosa de la
vida que no solamente ya no nos interesan, sino que los clausuramos para
siempre.
-Ya no nos machacamos con los dichosos “porqués”
-. Lo pasado, pasó, y no es tiempo de rebobinar, sino de
zanjar y de mirar hacia adelante que es la única mirada posible si quieres ser
feliz, y que sean felices los que te rodean.
-Ya no somos niños, y no nos serviría de nada enrabietarnos,
solamente sacaríamos tristeza de alma, que es la que más duele.
-No debemos querer tener nada que ver con quien no nos
quiere. “AL enemigo que huye, puente de plata”, y repetir la frase que decía mi
abuelita: “Esto es lo mejor que nos podía pasar”.
-Cambiar es sano, porque nadie puede jugar con las cartas
marcadas.
- Si perdimos, perdimos, y ya está, pasaremos la hoja y
volveremos mañana a vivir el presente que está por estrenar.
-Hemos cambiado, y ahora no encajamos donde estábamos ayer y
anteayer, ya no es lo mismo……
-Yo creo que he aprendido mucho, (aunque soy consciente de
que aún me queda bastante camino), creo que debo estar en un curso intermedio,
porque estoy, en ese punto como decía Newton en el que “Lo que sabemos es una
gota de agua; lo que ignoramos es el océano”
-Intento desapegarme de lo que no me gusta y no me conviene,
aunque no siempre es fácil, porque aunque nadie sea indispensable para nadie, a
veces tenemos mucha costumbre de algo o de alguien, y lo echamos de menos
-La gente, me sigue gustando mucho, y me sigue
sorprendiendo. Me encanta hablar con personas que no conozco, las encuentro muy
interesantes, han vivido una vida llena de experiencias con las que nosotros
nunca nos hemos cruzado, y oírlas contar sus anécdotas es muy curioso.
-Hay que abrir nuevas puertas a las oportunidades que nos da
la vida, y poner nuestras ilusiones en ella, porque ya sabemos a ciencia cierta
que aunque la tormenta sea muy larga, el Sol, nos está esperando detrás de las
nubes.
-Conservaremos a nuestros seres queridos en nuestro corazón
y a nuestra mano, porque nos proporcionan tanta felicidad al permitirnos
quererlos y dejarles que nos quieran y que nos mimen, y que son, en definitiva, los que nos alegran
cada día la vida y nos animan a seguir adelante haciendo camino.
-El presente es solo nuestro, y como sea, depende de la manera en que
nosotros lo miremos.
-Hay que tener el coraje de soñar cada día, para intentar
conseguir los sueños.