Hoy hacía un calor tremendo en Madrid, y he acompañado a mi hija Gema a Ikea, que es lo mismo que participar en un maratón, porque el recorrido en zigzag por sus inmensos pasillos , te dejan exhausta, así que en un momento determinado, me he sentado en la cafetería a esperarla, mientras ella seguía investigando por las distintas secciones.
-He pedido
un café y un helado, y me he sentado a mirar a la gente.
-Sentarte a
mirar a los de tu alrededor es muy entretenido, porque ves claramente al no
oírles lo que está sucediendo de verdad, ya que su lenguaje corporal les
delata.
- Los
hombres, en general no escuchan y no se interesan por lo que les está diciendo
su mujer, o su novia, o su hija o su madre, da lo misma la edad, porque apenas
las escuchan, mientras que las mujeres, se paran , les miran, asienten o
niegan, o discuten, pero casi siempre les prestan atención.
-A mi lado
había un grupo de mujeres de distintas edades con tres niños pequeños, que
charlaban animadamente y se reían,mientras les veían jugar.
- Los niños de vez en cuando iban a contarles
algo, y todas participaban muy alegres y comentaban entre ellas sonriendo .
-Al fondo,
había una pareja de mediana edad, y mientras la mujer le hablaba, el fingía
escuchar, pero se le veía distraído y sin ganas de participar, mientras que
cuando hablaba él, ella le atendía e incluso le sonreía un poco.
-A mi
izquierda, sentados en un sofá estaban una pareja muy joven. Ella hablaba y
hablaba, y el negaba con la cabeza, mientras leía el periódico, pero se veía claramente que no escuchaba sus argumentos.
-Una vez leí
que a los hombres les cansa escuchar a las mujeres, y hoy me he acordado,
porque a este chico desde luego le pasaba eso sin ningún género de duda.
-Saber
escuchar es un arte, y probablemente influya el hecho de que somos hijos de
nuestra evolución, y los hombres siempre se han dedicado a cazar, mientras que las mujeres, aunque
también buscaran el sustento para la prole, lo hacían paseando
por los bosques en grupo con otras mujeres, madres, hijas, abuelas y niños, y
mientras recogían frutos, hablaban y
escuchaban.
-Nosotras
estamos acostumbradas a mirarnos mucho cuando hablamos, así que no nos suele
pasar desapercibido el gesto de nuestro interlocutor, y solemos notar si está
cansado, enfadado, o simplemente aburrido.
-Dicen los
científicos que las mujeres tenemos mejor oído que los hombres, y que por eso
nos resulta más fácil captar los distintos matices, y es más fácil escuchar
dándonos cuenta de los cambios emocionales.
-Aunque a
los hombres les molesta mucho oírlo, las mujeres tenemos mucha más facilidad
que los hombres para conectar los dos
hemisferios cerebrales, porque tenemos un cuerpo calloso externo que más grueso
que el que tienen los hombres, y por ello tenemos una tercera parte más de
conexiones entre los dos hemisferios cerebrales:
- El derecho es el de la parte artística, creativa
y emocional y el izquierdo que controla la parte racional, nosotras los
conectamos y los hombres no, por eso los hombres, si nos escuchan, no se fijan
en nuestros gestos corporales, ni en las expresiones faciales, ni en el tono de
voz, y si se fijan en nosotras, es que no nos están escuchando mientras que las mujeres si, y por
eso nos damos cuenta inmediatamente de cómo se siente el otro, vemos si está
enfadado, o no al momento.
-Las mujeres
tenemos la habilidad de comunicación interpersonal situada en dos zonas , una
en el hemisferio cerebral izquierdo, en la parte frontal, una más pequeña en el hemisferio derecho, mientras
que los hombres no tienen una zona determinada para la habilidad de
comunicación, si no que se sitúa en la totalidad del hemisferio cerebral
izquierdo.
-Al tener
dos áreas en los dos hemisferios, las
mujeres somos mejores comunicadoras que
los hombres , y también escuchamos mejor.
-Por eso ,
la solución está clara, cuando hablemos con nuestro marido, novio, hijo o
padre, les daremos mensajes cortos y concretos, porque si no es así, se aburren
y dejan de escucharnos………