La vida es sorprendente y complicada. Casi nunca
suceden las cosas como esperábamos ; por eso lo mejor es vivir
cada momento sabiendo que es único e irrepetible , tirar los malos a un pozo
profundo para no recordarlos más y atesorar solo los momentos que nos gustaron
, nos quitaron el aliento, nos emocionaron y nos parecieron maravillosos en un cofre especial que
llamaremos “Cofre de La Felicidad”.
- Ese “Cofre”, lo tendremos a mano para abrirle siempre que estemos tristes y así disfrutaremos de nuevo de aquellos buenos momentos, las risas, las
sorpresas y las emociones igual que cuando sucedieron.
-Algunas veces necesitaremos esforzarnos mucho
para superar una serie de dificultades que se nos presentarán, con las que no
contábamos , por eso deberemos aprender a improvisar y a cambiar de planes
sobre la marcha.
-Después de resolver problemas complicados ,
aprendemos la manera de hacerlo, y somos
un poquito más sabios.
-Cuando ayudamos a los demás solo por el placer
de ser útiles, aumentamos nuestra fuerza y nuestro coraje.
-Nunca
tendremos miedo , porque jamás Dios nos dará algo que no podamos
soportar.
-Tenemos que tener muy claro como dicen los
psicólogos que lo que no suma, resta, así que tanto las personas como las cosas
que no nos aportan felicidad y nos descargan la energía, deberemos alejarlas de
nosotros, y si no podemos, pues nos alejaremos nosotros de ellos .
-Muchas veces nos vemos enfrentados a dos caminos
y nos toca elegir , tenemos un 50% de posibilidades de acertar y otro 50% de
confundirnos, por eso nunca nos vamos a reprochar que elegimos el camino
equivocado, simplemente , volveremos atrás y reiniciaremos el otro.
-Cuando las cosas se enredan y parece que todo
está actuando en nuestra contra, deberemos sacar de nuestro cofre un paquetito
de sentido del humor, porque si lo buscas , dentro de una tragedia , siempre
hay una comedia.
-Los errores son aprendizajes. Recuerda que
cuando Thomas Alva Edison presentó por fin su maravillosa bombilla, los
periodistas le preguntaron qué cuantos fallos había tenido antes, pero él
contestó sonriendo:
“Señores, no hubo mil intentos fallidos, ha sido un invento de mil
pasos.
-Buenas noches.