Acabo de hablar con una amiga muy querida, que
ha vuelto hoy por fin a casa después de un largo ingreso en el hospital.
-Está transformada, parece otra persona, porque
estos días al hablar con ella , tenía un hilo de voz que apenas se la entendía.
-Cuando la operaron de la cadera, ella creía que iba a tener una rápida
recuperación, pero al ver que todo era mucho más largo y que la rehabilitación
la resultaba muy dolorosa, empezó a decir que ella ya de esto no se iba a
recuperar, que no tenía fuerzas.
-Yo, me he cansado de repetirla a diario
que en nuestra cabeza mandamos nosotros
y que así como pensemos que nos vamos a sentir nos sentiremos , pero ella no lo
creía y ha tenido tres veces que volver a ingresar por diferentes infecciones.
-Ahora creo que se ha dado cuenta de lo
importante que es su actitud , y ha decidido mandarse solamente mensajes
positivos de recuperación, curación y vuelta a la vida normal.
-Comprendo perfectamente su desánimo y sus momentos de duda , porque cuando no
salen las cosas como esperamos, nos sentimos un poco perdidos , además de desanimados
y desmotivados.
-Esta amiga tenía muchísimo estrés, porque
necesitaba ayuda para todo, y sus hijos están todos independizados y se tenían
que turnar, entonces al aumentar la producción de adrenalina y cortisol para
preparar a su cuerpo a reaccionar, han disminuido sus leucocitos que son las
células que nos defienden de contraer otras enfermedades, y no la han podido
ayudar.
-De todas maneras el hecho de repetir
infecciones, fiebre y resfriados indica que su sistema inmunológico no está
atacando ni destruyendo a los intrusos
que se cuelan y lo invaden, ya sean virus, hongos o bacterias, pero como ahora
lo ha superado, debe empezar a luchar ella con sus pensamientos y sus palabras
de esperanza y curación.Espero que enseguida brindaremos con un cafetito , o con un té
-Buenas noches.