El valor de las cosas es muy relativo. La vida nos va
presentando diferentes cartas, y nosotros las vamos jugando según el momento, y
así poco a poco cada uno vamos estructurando nuestro orden de valores, por eso
las personas somos tan diferentes, porque todo nuestro bagaje influye en
nuestra manera de afrontar las cosas y de valorarlas.
-Las personas que hemos vivido como yo vidas interesantes,
tenemos un orden de valores que cada vez se va pareciendo más al de los niños
de Primaria, porque nos importan lo que más las personas, aquellas personas
que queremos, y que son las que dan un sentido a nuestra vida.
-Las cosas, cada vez nos importan menos, porque son solo
cosas que se pueden reponer y sustituir.
-A veces una sonrisa, un apretón de manos, valen mucho , porque llegan en el momento adecuado.....
-La maravilla y la riqueza de esta vida, está en las
personas que nos la hacen agradable, hemos venido a este mundo, como el que va
a una escuela, y tenemos tiempo de aprender que debemos aprovechar al máximo,
pero también tiempo de recreo que debemos emplearlo en divertirnos lo más
posible, y en reírnos a carcajadas disfrutando lo máximo, porque cada instante
perdido, ya se perderá para siempre.
-El Tiempo no espera a nadie, por eso atesora tus buenos
momentos.
-Debemos respetar nuestro entorno, porque como decían los
indios siux, no nos pertenece, no es una herencia de nuestros padres sino un
préstamo de nuestros hijos.
-La gente que está siempre enfadada, está desperdiciando de
tal manera su vida, porque no se dan cuenta de que ni con todo el oro del mundo
podrían retroceder un instante, y pierden su vida, en discusiones estúpidas, y
en quejas de sus egos doloridos.
-Si queremos gozar de buena salud mental y corporal, no nos
lamentaremos de aquel vaso de leche derramada, porque no tiene arreglo, ni
planearemos con tiralíneas nuestro futuro, porque la vida es cambiante y
sorprendente
- Tendremos que vivir una vida digna y sana ahora mismo, y
esta será la maravillosa semilla que formará nuestro misterioso mañana.
- Debemos recordar el evangelio según San Mateo, 6, 28-29,
en el que Jesucristo dice: “Observad a los lirios del valle, cómo crecen; ellos
no se fatigan ni tampoco hilan. Pero yo os digo que ni Salomón en toda su Gloria, se pudo nunca
vestir como uno de ellos”.
-Esto, si te fijas, parece salido de un libro de autoayuda,
porque si persigues tus sueños, los acabas consiguiendo.
-Cuando pienses que todo está en tu contra, recuerda que los
aviones se elevan contra el viento.
-Se feliz todos los días, a todas horas, no pospongas la
felicidad para cuando tengas……
-La felicidad está hecha de momentos.
-Envejecen los que dejan de reírse.
-La vida no sería nada si nosotros no tuviéramos el valor de
intentar algo nuevo.
-
-Emparéjate con quien te quiera y te comprenda, nunca
aceptes que te corten tus alas ni que limiten tus sueños.
-No hagas caso de los “ rolleros”, que hablan y hablan queriendo engatusarte pero en el
fondo no son más que cántaros vacíos, que son siempre los que más ruido hacen.
-Trata a tus seres queridos con educación, no pienses que la
confianza te da permiso para ser grosero.
-Mi abuela siempre decía que la buena educación es como el
cero en aritmética, que solo no vale
nada, pero que en cambio puede aumentar mucho el valor de los demás.
-Tendremos los
valores que escojamos, y lo que hagamos hoy, será muy importante porque
estaremos mejorando nuestra vida.
-Intentaremos rodearnos de aquellas cosas que nos dan
felicidad.
-Nunca debemos olvidar, que aunque el destino baraja
nuestras cartas, siempre seremos nosotros los que jugamos y podemos decidir que
ficha ponemos.