-Decía Goethe: “Escribir la historia es una
forma de desembarazarse del pasado”.
-Todos sabemos desde siempre que verbalizar
nuestros problemas, es bueno, porque empezamos a considerarlos con un poco de distancia.
-La vida a veces ha sido dura con algunas
personas, o a ellas las ha afectado de tal manera que no son capaces de olvidarse
de aquellas cosas y continuar, porque su pasado les persigue y les machaca, y les paraliza.
-Escribir las cosas malas que pensamos que nos
sucedieron, o que nos hicieron, o que nos han hecho daño y que nos siguen
doliendo, es muy positivo porque nos permite analizar exactamente aquellos
sucesos y así podremos por fin terminar con ello, haciendo una cosa tan fácil
como es partir el papel en trocitos y echarlo a la basura, para demostrar al
Universo, que aquello no existe, ya que no era más que basura.
-Con esto conseguiremos tener fortaleza
emocional, que es algo que aprendemos ya que no nos viene dado, como la
fortaleza física.
-Tenemos que ser como las águilas que no aletean
luchando contra el viento. Las águilas planean aprovechando las corrientes de
aire , y así consiguen mucho más con menos esfuerzo..
-A partir de ese momento, ya tenemos que hacer
borrón y cuenta nueva, y podremos empezar a escribir nuestros sueños…. las
cosas que queremos conseguir, lo que nos hace ilusión…etc, y lo releeremos
muchas veces, hasta que pongamos a su lado un tic, que significará que ¡ya lo hemos conseguido!
-Ahora tiene que empezar una vida mucho mejor,
sin mirar atrás ni para coger impulso.
- Cuando descubras tu valor real, podrás empezar
a valorar a los demás, y vivirás una vida mucho más plena.
-y termino con una frase que decía mi padre de Sir Winston Churchill:
-“Un optimista ve una oportunidad en toda calamidad,
un pesimista ve una calamidad en toda oportunidad”