"SI NO TIENES LO QUE TE GUSTA, HAZ QUE TE GUSTE LO QUE TIENES"
De tí depende que tu vida sea feliz,debes escoger tus ingredientes.


lunes, 2 de junio de 2014

"Leonardo Da Vinci:La última Cena"


Hace años leí una historia preciosa sobre “La última cena “de Leonardo da Vinci, y hoy,  la quiero compartir con vosotros.

-Leonardo da Vinci, fue un genio, y  un artista tan genial y tan avanzado para su época,  que si viviera  hoy en día seguiría siendo único y moderno.

-Una de las últimas obras importantes que hizo fue “La Última Cena”, donde quiso representar el momento en el que Jesús, se despide de sus apóstoles, y  les comunica que uno de ellos le va a traicionar.

-Leonardo que  era extremadamente exigente con los modelos que posaban para cualquiera de sus cuadros, con estos, lo fue muchísimo más porque quería encontrar a las personas más adecuadas para representar a los apóstoles y a Jesús.

-Se sintió muy feliz al encontrar un modelo para Jesús, ya que su rostro  irradiaba  bondad, pureza, generosidad, y una larga lista de bellos sentimientos , a la vez que era un joven guapo que tenía unos rasgos muy varoniles.

- El pintor le preguntó si querría ser su modelo, a lo que el joven aceptó muy honrado, ya que era un gran honor posar para el gran Leonardo da Vinci.

-Poco a poco fue escogiendo a los apóstoles, pero solo encontró 11 modelos, porque ninguno le parecía adecuado para encarnar a Judas, ya que él lo imaginaba como un hombre maduro, cuya cara mostrase claramente su alma avariciosa y traicionera, así que tardó muchos años en terminar el cuadro.

-Un día, escuchó hablar de un preso que había cometido crímenes horrendos, y que debía tener la edad que Leonardo necesitaba para Judas.

-Leonardo arregló los permisos necesarios, y se fue a visitar al malvado asesino con la esperanza de que le sirviera, y nada más verle, tuvo la seguridad de que lo había encontrado, así que hizo todos los trámites para que le llevasen al preso a su estudio por las tardes para pintarle.

-El preso llegaba cada tarde, escoltado por varios guardias, y Leonardo le pintó durante muchas sesiones, hasta que la obra estuvo terminada.

-Leonardo se sentía tan feliz del resultado, que les pidió a los guardias que le permitieran al preso contemplar la pintura para la que había estado posando.

-Cuando el reo vio  el maravilloso cuadro, cayó de rodillas llorando con tal desconsuelo que Leonardo intrigado le preguntó por el motivo de sus lágrimas, a lo que el malvado preso respondió:

-“Maestro Leonardo, no se acuerda usted de mí?”

-No, contestó el pintor mirándole fijamente:

-“Yo, jamás te había visto antes”


-“Yo soy aquel joven que hace 19 años escogió usted para  pintar a Jesucristo en este cuadro”….