Existen una serie de personas que se quejan de
todo; han hecho de la queja un deporte y se quejan del frío, del calor, de los
hijos, del marido o la mujer, en fin de todo lo habido y por haber…
-Lo que no piensan esas personas al comportarse
de esa manera es en lo perjudicial que resulta una persona que se queja de
todo, porque no solo amargan su carácter, sino que terminan aburriendo a todos
los que les estamos oyendo quejarse todo el día.
-La queja aunque en un momento puntual nos sirva
para desahogarnos, no sirve de nada si no buscamos la solución para resolver el
problema del que nos estamos quejando.
-Las personas quejicas, a fuerza de quejarse ,
solo ven la parte negativa de las cosas y de las situaciones y las atraen hacia ellos.
-Estar pendiente de lo malo y de lo peor, provoca
rabia , tristeza y frustración y afecta negativamente a la salud cerebral.
-Estas personas asumen el papel de víctimas y
muchas veces lo hacen para llamar la atención, ya que prefieren tener atención negativa a pasar desapercibidas.
-Las personas que no paran de quejarse , acaban
siendo pasivos, porque nunca resuelven nada , solo se quejan de lo mal que
están , y acaban estresadísimos tanto ellos como los que les escuchan.
-Si tenemos algún familiar, o amigo cercano que
pertenece a este grupo de gente , podremos intentar con cariño explicarles que
si ellos quieren pueden cambiar, así que vamos a dar unas pautas para intentar
mejorarles y que vean lo diferente que puede empezar a ser su vida si lo hacen.
-En cuanto algo no
le vaya bien, en vez de quejarse, se pondrá a buscar una solución y si no la
encuentra solo, pedirá ayuda a las personas competentes.
-La familia y los amigos estarán mucho más
contentos y les harán más caso, al
verles a ellos de otra manera.
-Dejarán de tener esa serie de emociones
negativas como celos, envidia, tristeza…etc.
-Se convertirán en personas responsables de las cosas que dicen y que hacen , sin
necesidad de culpar a nadie más.
¡Manos a la obra!
-Buenas noches.