


En el Norte de California, Suryia, un pequeño orangután huérfano, que los veterinarios encontraron perdido en la selva, y se llevaron al centro para su cuidado, entró en un estado de depresión tal que ya ni siquiera comía. Los veterinarios de TIGERS Instituto de Especies en Extinción de Playa Mirto en Carolina del Sur estaban muy preocupados, y le pusieron distintos tratamientos con la esperanza de que mejorara, pero no consiguieron nada, así que pensaron que tardaría poco en morirse.
-Una mañana,
-Una mañana,