Me acaba de mandar un whattsApp mi amiga Silvia,
que me ha dejado tan estupefacta que lo tengo que compartir con vosotros.
-Todos o casi todos dejamos el móvil a
cualquiera si tiene que hacer alguna llamada y se le ha olvidado el suyo, y nos
parece algo lógico y natural, pero a partir de ahora estoy segura de que no se lo
vais a volver a dejar a ningún desconocido.
- Por lo visto un grupo de amigas estaban
tomando café, cuando se les acercó una señora bien vestida y con buen aspecto,
muy nerviosa porque le acababan de robar el coche, y que tenía su móvil dentro,
pidiéndoles que por favor le prestara alguna su móvil para llamar a su marido y
que la fuera a buscar.
-Una de las amigas le prestó su móvil, y se
alejó un poco para hablar, al rato volvió muy agradecida, se lo devolvió, y se fue a la acera de
enfrente a esperarle.
-Ellas siguieron su charla, y al rato la señora
se volvió a acercar pidiéndole de nuevo el móvil, porque a lo mejor no le había
dicho bien la dirección, se alejó otro poco, se lo devolvió y se fue muy
agradecida.
-Al llegar a su casa, encontró a su familia
angustiados y llorando por ella, porque por lo visto, la señora en cuestión
había llamado a su casa , diciendo que la tenían secuestrada, que por eso
llamaban desde su móvil, y le dieron la descripción y era ella, así que les dijo
una cifra que tenían que darle , y la segunda llamada era para
confirmar que ya estaba todo hecho, así que no volveremos a prestar nuestros
teléfonos a nadie.
-Lo que es evidente es que los delincuentes nunca
descansan , y están alerta a las oportunidades, por lo que enseguida ven a un
grupo de personas alegres y relajadas como un blanco fácil, y los familiares
que están en casa, harán lo que sea con tal de salvarnos , así que actúan de
manera rápida y no dejan pistas.
-Agradezco mucho a mi amiga Silvia que me haya mandado este mensaje, y espero que
a todos los que lo leáis os sirva también de lección para no ser tan confiados con gente desconocida.
-Buenas noches
