-En una pequeña ciudad japonesa llamada Kishi,
la compañía ferroviaria cesó sus operaciones por bancarrota. Los vecinos no
querían que se cerrara su estación, porque entonces quedarían aislados, así que
consiguieron que la compañía les dejara
una línea automática, y nombraron jefe de estación a un vecino con pocas
responsabilidades que vivía cerca de la estación.
-El Sr Koyama, fue elegido como jefe de
estación, y había adoptado un gato llamado Tama que llevaba a la estación con
él cada mañana y que se acostumbró a recibir a los viajeros de los trenes con muestras
de alegría.
-En el año 2007, el Sr Koyama, tuvo muchos
problemas económicos, y pidió a la compañía que permitieran a su gatita Tama
vivir en la estación, puesto que los viajeros la conocían y la querían, y
durante las esperas se sentaba con ellos, ronroneaba y se dejaba acariciar, así
que los viajeros siempre la traían comida y golosinas de gato.
_La compañía ferroviaria, no solo aceptó que se
quedara en la estación,. Sino que la nombraron jefa de estación, y la construyeron
una pequeña caseta en la estación, igual
que la que tienen los jefes de otras estaciones, pero adaptada a su tamaño, con
cristales desde donde podía ver los
trenes y saludar a los viajeros.
-Por la mañana la gatita se sentaba en su almohadón con su
gorro de jefe de estación, y poco a poco se fue convirtiendo en un centro de atención de niños
y mayores que empezaron a viajar en el tren a Kishi, solamente para ver a la gatita.
-Los visitantes aumentaron tanto, y estaban tan
deseosos de llevarse un recuerdo de la gatita , que se empezaron a crear
souvenirs alrededor de de Tama. Empezaron vendiendo postales con su foto con
gorro y medalla, camisetas, llaveros tazas, y se forman cada día auténticas
colas de turistas que quieren acariciarla y hacerse una foto con ella.
-Desde que Tama se hizo famosa, han ganado con
los turistas más de 1.100 millones de yenes, unos 10 millones de dólares.
-Desde el año 2008 es “Super jefa de estación”, y
la ha nombrado en una solemne ceremonia oficial, el mismísimo presidente de la
compañía. Tama lució para el acto traje de gala de caballero de Wakayama, y el
alcalde la condecoró con todo el protocolo oficial.
-Tama tiene que estar una serie de horas en su
despacho donde tiene arenero, colchón y librerías a su altura, y se pasea por él
con parsimonia felina ante la admiración de los visitantes.
- Al terminar su jornada laboral, ya sin gorro,
se pasea mimosa entre los viajeros ronroneando ante sus mimos.
-Ahora el tren se ha decorado con su imagen, y
se le llama Densha Tama, y llega cada día lleno de turistas que solo quieren
ver a la dulce gatita Tama.