Preguntar es síntoma de curiosidad y de
inteligencia y a nuestro cerebro le encanta que le pregunten.
-Los niños se desarrollan naturalmente hasta que
les llega la edad de los¿ por qué?, y de los¿ para que?
-Los griegos dejaban entrever su capacidad de
asombro, con sus curiosas preguntas por el cosmos, el caos y el ser y el no
ser.
-Al preguntar ponemos en marcha nuestra maquinaria mental y el cerebro investiga y encuentra soluciones.
-Una de las mejores formas de trabajar con
nuestro cerebro es haciéndole preguntas pequeñas.
-Nuestro cerebro ama las preguntas , y un
experimento fácil y divertido es preguntar a nuestra amiga o compañera que de qué
color es el coche que había aparcado a su lado.
-Tu amiga , seguramente te contestará con cara
sorprendida , que no se ha fijado, que
no tiene ni la menor idea.
-Repite la pregunta al día siguiente, y al otro,
hasta que ella no tenga más remedio que fijarse para contestarte.
-Cuando viajamos en avión, nos sorprende la
cantidad de gente que hace crucigramas y sudokus o sopas de letras.
-Son esencialmente series de preguntas que
seducen a nuestro cerebro que teme el aburrimiento que le espera de una serie
de horas de viaje sentado sin nada en
que entretenerse.
-A los niños les aburren las largas
explicaciones , pero les encantan las preguntas tales como:
- ¿Qué animal es este?, a la vez que les enseñamos
una foto, y de esta manera aprenden mucho mejor que cuando les damos una larga
y aburrida explicación.
-Cuando nos dan una serie de órdenes, para incorporar buenos hábitos a nuestras
rutinas, como que tenemos que beber agua a lo largo del día, las recordamos
pero no las cumplimos, en cambio si nos preguntan:
-¿Qué se te ocurre hacer para recordar que
deberías beber agua cuando vas conduciendo largo tiempo?
-Un paciente enseguida contestó que si llevaba
la botella llena y la ponía en el salpicadero del coche, sería un estupendo
recordatorio de que tenía que beber.
-Para resolver un problema que nos preocupa, lo mejor es decir en voz alta a nuestro cerebro
por la noche antes de acostarnos :
-¿ Que podría hacer yo, para intentar resolver
este problema ¿, y la respuesta se nos ocurrirá por la mañana, porque nuestro
cerebro la ha resuelto por la noche.
-Buenas noches.